El humorista afirma que “nunca” consideró “que esto podría verse como algo más que una imitación de un ser humano”.
El popular humorista y presentador estadounidense Jimmy Kimmel pidió perdón este martes por una serie de imitaciones que hizo en el pasado de personajes famosos afroamericanos, y que en los últimos días habían sido criticadas por “racistas” en las redes sociales.
Kimmel se ha visto en el centro de la polémica al reaparecer una serie de actuaciones cómicas en las que, por ejemplo, usa el ‘blackface’ (maquillaje para interpretar a personas de color) para imitar al exjugador de la NBA Karl Malone o a la estrella televisiva Oprah Winfrey. Además, en un pódcast de 2013, Kimmel admite haber imitado a Snoop Dogg en un álbum navideño cómico de 1996 donde usó la ‘palabra N’ varias veces.
Uno de los críticos del presentador fue Donald Trump Jr., hijo del presidente estadounidense, quien sugirió que ABC debería dejar de emitir el programa ‘Jimmy Kimmel Live!’.
“Imitación de un ser humano”
En un comunicado, Kimmel admitió que durante mucho tiempo ha sido “reacio” a abordar el tema, “ya que sabía que haciéndolo sería celebrado como una victoria por aquellos que igualan disculpas con debilidad y que animan a los líderes que usan los prejuicios para dividirnos”. Sin embargo, asegura que “ese retraso fue un error”.
“No hay nada más importante para mí que su respeto”, señaló el presentador, que pidió perdón “a aquellos que genuinamente se sintieron heridos u ofendidos” por el maquillaje que usó o las palabras que dijo.
El humorista afirmó que “nunca” consideró “que esto podría verse como algo más que una imitación de un ser humano, una que no tenía más que ver con el color de la piel de Karl que con sus músculos abultados y su cabeza calva”.
Al enumerar algunas de las imitaciones que hizo —incluidas las de Snoop Dogg, Oprah, Eminem, Dick Vitale, Rosie— Kimmel indicó que, en cada caso, pensó en ellas “como recreaciones de famosos y nada más”. Sin embargo, reconoció que, “mirando hacia atrás”, muchas de esas apariciones “son vergonzosas”, y confesó que es “frustrante que estos momentos irreflexivos se hayan convertido en un arma utilizada por algunos para disminuir mis críticas a las injusticias sociales y de otro tipo”.
Al mismo tiempo, el presentador afirmó creer que ha “evolucionado y madurado en los últimos veinte años”, y espera que esto “sea evidente para cualquiera” que vea su programa. “No seré intimidado por aquellos que fingen indignación para avanzar en sus agendas opresivas y verdaderamente racistas”, asevera.
Fuente: RT
