La cantante se ha sometido voluntariamente a la prueba para desmentir que consuma cocaína.
Tras varias semanas con nuevos enfrentamientos judiciales y mediáticos por la custodia de su hijo en común, Andrea Nicolás, parece más que evidente que la guerra entre Paulina Rubio y Colate está todavía bastante lejos de terminar.
Después de que el pasado mes de mayo un juez de Miami desestimara la demanda interpuesta por el exmarido de la cantante mexicana, que había solicitado que se le realizara un test psicológico después de mostrar comportamientos “erráticos” en público y que se le retirara la custodia, hay novedades en el caso.
Al parecer, en los últimos días Rubio se ha sometido a un test de detección de drogas para desmentir que sea consumidora de cocaína, algo sobre lo que se especuló a raíz del vídeo de una actuación suya en la que Colate y miles de usuarios en las redes sociales vieron un comportamiento muy poco habitual y preocupante.
A pesar de que la intención de Paulina al solicitar esta prueba era terminar con los rumores y habladurías sobre ella y limpiar su imagen por el bien de su guerra por la custodia, con este análisis para la detección de nueve tipos de droga, se ha terminado evidenciando que durante un concierto en California en febrero la artista consumió marihuana, la única sustancia en la que ha dado positivo.
Nada más enterarse, Colate, muy descontento con la acción de su expareja antes de la próxima vista para el juicio, ha hecho unas breves declaraciones a la cadena latinoamericana Imagen Televisión. “Nadie le ha pedido que se haga un análisis de drogas, me ha parecido que la audiencia fue absurda. He sacrificado muchas cosas para que mi hijo tenga a su papá y a su mamá cerca y así voy a seguir“, ha asegurado el exconcursante de Supervivientes, que en su última intervención pública aseguró que el juez sí estaba investigando a Paulina para decidir si estaba en condiciones de cuidar a su hijo.
Después de este test de drogas de la mexicana, el resultado de este formará parte del próximo cara a cara de la expareja en los juzgados el 22 de julio como prueba. Sea cual sea la decisión final del juez en torno a esto, la artista ya tiene una advertencia sobre la imposibilidad de consumir cualquier tipo de sustancia alcohólica o estupefaciente en frente del pequeño de ocho años.
Fuente: La Vanguardia