El ministro de Hacienda, Jochi Vicente, afirmó este lunes que la propuesta de reforma fiscal presentada por el gobierno no es un plan improvisado, sino que ha sido un proyecto en desarrollo desde la campaña presidencial de 2019-2020.
Según el funcionario, se ha trabajado en esta reforma por más de cinco años para garantizar su impacto positivo en el desarrollo del país y su sostenibilidad a largo plazo.
El presidente Luis Abinader, junto a la vicepresidenta Raquel Peña, encabezó la presentación del proyecto de ley de modernización fiscal, que será sometido este martes ante el Congreso Nacional. Esta iniciativa tiene como objetivo mejorar los servicios públicos en áreas clave como la educación, salud, seguridad, transporte, salarios y programas de ayuda social.
Vicente explicó que la reforma busca crear un ambiente seguro y moderno para todos los dominicanos, asegurando que el gasto público necesario para financiar estas mejoras no se basará en endeudamiento, sino en una optimización de los recursos. El ministro destacó que República Dominicana tiene uno de los gastos públicos más bajos de la región, lo que limita su capacidad para satisfacer las necesidades básicas de la población.
Entre los puntos clave de la propuesta se encuentra la implementación de una ley de responsabilidad fiscal, la fusión y eliminación de entidades gubernamentales, y medidas de contención del gasto público. El proyecto también contempla un aumento en los programas de protección social y mejoras salariales para sectores vulnerables.
En el ámbito tributario, la reforma introduce cambios importantes, como la creación de un nuevo tramo de impuestos sobre la renta para las personas con ingresos superiores a RD$2.4 millones anuales, y la eliminación de privilegios que generan inequidades entre los contribuyentes.
El gobierno estima que la reforma fiscal generará una recaudación total de RD$122,486.6 millones, lo que representa un 1.5% del PIB.
