El Banco Central de la República Dominicana (BCRD), informó que el Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE) registró una notable expansión interanual de 5.8 % en el mes de junio, superior al 4.8 % observado en mayo y al 4.7% del mes de abril de 2022.
Con este resultado el crecimiento promedio del IMAE correspondiente a enero-junio de 2022 se ubicó en 5.6 % respecto al mismo semestre del año anterior.
A través de un comunicado, la entidad destacó que el incremento acumulado de la economía dominicana en los primeros seis meses se ha logrado en el contexto de una adecuada coordinación de política monetaria y fiscal ante los riesgos derivados del entorno internacional.
Asimismo, en el ámbito doméstico las perspectivas se mantienen positivas, pronosticándose una expansión del Producto Interno Bruto (PIB) de 5.0 %, una tasa cercana al potencial, de acuerdo al sistema de pronósticos del Banco Central y en línea con lo señalado por organismos multilaterales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial.
El resultado del mes de junio de 2022 estuvo sustentado, en parte, por el comportamiento favorable de las industrias del régimen de Zonas Francas y de la minería, así como por un buen desempeño de las actividades de servicios en su conjunto, y de manera particular Hoteles, Bares y Restaurantes en la cual incidió la llegada de 645 mil turistas, un máximo histórico para un mes de junio. De igual forma, actividades como comercio, transporte, manufactura local, salud, agropecuaria y otros servicios incidieron de manera importante en el incremento del valor agregado del referido mes.
El comportamiento de la actividad económica dominicana durante el período enero-junio de 2022 está sustentado principalmente por los sectores que evidenciaron mayores tasas de crecimiento en su valor agregado real, entre los cuales se encuentran: hoteles, bares y restaurantes (34.3 %), salud (11.6 %), otras actividades de servicios (10.3 %), manufactura de zonas francas (8.6 %), administración pública (8.5 %), transporte y almacenamiento (8.0 %), comercio (6.6 %), energía y agua (6.3 %), servicios financieros (5.6 %), entre otras.
La actividad hoteles, bares y restaurantes mostró un incremento en su valor agregado de 34.3 % en el período enero-junio 2022. Este notable desempeño responde a la llegada de 3,547,143 viajeros en enero-junio del presente año, para un aumento de 1,649,500 pasajeros (86.9 %) en los primeros seis meses del 2022 con respecto al mismo período de 2021.
Dicha tendencia favorable se reflejó nuevamente en la llegada de pasajeros no residentes recibidos en el mes de julio de 2022, alcanzando la notable cifra de 735,064 turistas, rompiendo récord al ser el mejor mes de julio de toda la historia, de acuerdo a los datos anunciados por el Ministro de Turismo.
De manera particular se destaca el efecto positivo que han tenido las políticas de impulso a la industria turística implementadas por el Gabinete de Turismo encabezado por el Presidente Luis Abinader de la mano con el Ministerio de Turismo para garantizar la estabilidad del sector y consolidar su reactivación.
En este sentido, el Banco Central resaltó la ejecución de estrategias para atraer inversión de capital extranjero, así como para captar pasajeros de mercados con potenciales ante cambios en los patrones globales de consumo por los riesgos latentes en el entorno internacional, lo que coadyuvaría a alcanzar la cifra de 7 millones de pasajeros no residentes al cierre del año 2022.
Por otro lado, las actividades de comercio y de transporte y almacenamiento exhibieron incrementos en sus valores agregados de 6.6 % y 8.0 %, respectivamente, explicados por la expansión en los servicios de transporte de carga, cónsono con el dinamismo en la producción, distribución y comercialización de bienes agropecuarios y manufacturados de origen local e importado.
En cuanto al desempeño de las zonas francas, el crecimiento interanual de 8.6 % en el valor agregado real de este sector en el primer semestre de 2022 está asociado al incremento en la demanda externa que se refleja en las exportaciones de bienes bajo este régimen, las cuales alcanzaron un monto acumulado de US$3,958.5 millones en enero-junio para una variación de 14.6 % respecto al mismo período de 2021.
Particularmente en junio de 2022, el valor nominal de exportaciones de zonas francas alcanzó los US$715.5 millones, impulsado en gran medida por las exportaciones de equipos médicos y quirúrgicos, productos eléctricos y textiles.
De acuerdo a las informaciones publicadas por el Consejo Nacional de Zonas Francas de Exportación (CNZFE) al mes de junio, el sector registró un total de 190,472 puestos de trabajo directos, el mayor número de plazas ocupadas en los últimos 22 años.
Asimismo, entre enero y junio de 2022 se aprobaron 49 permisos para el establecimiento de nuevas empresas de zonas francas, las cuales proyectan crear aproximadamente 5,617 empleos directos, así como realizar inversiones por un monto de RD$3,724.5 millones.
En relación a la manufactura local, esta actividad registró en enero-junio un aumento interanual de 4.5 % en su valor agregado, asociado principalmente al desempeño favorable de las actividades fabricación de sustancias y productos químicos, elaboración de bebidas y derivados del tabaco, fabricación de metales comunes y otros productos alimenticios.
En lo que respecta a las perspectivas del sector, las mismas se mantienen favorables, ya que de acuerdo a lo observado en el resultado más reciente del indicador mensual de la actividad manufacturera (IMAM) que compila la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD), el índice registró un valor de 53.4 en el mes de junio, por encima del umbral de 50.0 a partir del cual se considera que el panorama es positivo.
En cuanto a la actividad de intermediación financiera, la misma alcanzó una variación de 5.6 % en enero-junio de 2022 respecto a igual período del año anterior. Este comportamiento está sustentado en gran medida por la expansión de 13.2 % del crédito otorgado al sector privado en moneda nacional al cierre de junio de 2022.
Al analizar el desempeño de la construcción, la entidad bancaria observó que presentó una variación interanual de 2.0 % en enero-junio de 2022. La moderación del ritmo de crecimiento de esta actividad se explica en parte debido a que fue la de más rápida recuperación en el año 2021, como resultado de las medidas de apoyo autorizadas por la Junta Monetaria con recursos canalizados a través del sistema financiero.
Adicionalmente, incide el incremento de los precios de los materiales utilizados en su producción durante el período. La dinámica del sector está sustentada en la ejecución de proyectos de desarrollo residenciales, industriales y turísticos de capital privado, así como por las importantes obras de ingeniería civil e infraestructura impulsadas por el Gobierno.
El valor agregado de la actividad agropecuaria evidenció una variación acumulada interanual de 2.4 % al cierre del primer semestre de 2022. Es importante destacar el continuo apoyo técnico y financiero a pequeños y medianos productores agropecuarios por parte del Gobierno, a través del Ministerio de Agricultura y el Banco Agrícola, con el objetivo de mitigar los efectos adversos de las subidas de precios de los insumos en los mercados internacionales y, de esta manera garantizar la seguridad alimentaria nacional.
Mercado laboral
Por otro lado, los indicadores del mercado laboral continúan evidenciando una trayectoria de recuperación, asociada a la evolución favorable de la economía dominicana. Los resultados de la Encuesta Nacional Continua de Fuerza de Trabajo (ENCFT) correspondientes al trimestre abril – junio de 2022 revelan que el total de personas ocupadas (incluyendo los formales e informales) alcanzó los 4,702,017 trabajadores, para un aumento interanual de 169,309 ocupados netos (3.7 %). De esta forma, la tasa de ocupación, es decir la relación entre el total de ocupados y la población en edad de trabajar (PET), se ubicó en 59.9 %, 1.9 puntos porcentuales mayor a la registrada en el segundo trimestre de año anterior.
En cuanto a la tasa de desocupación abierta, que se define como el porcentaje de desocupados que están buscando activamente trabajo, ésta registró una notable reducción interanual al pasar de 7.6% en abril-junio de 2021 a 5.2 % en igual período de 2022, para una caída de 2.4 puntos porcentuales.
En torno a las expectativas para los próximos trimestres, se espera que el mercado laboral continúe reaccionando positivamente, conforme se ejecuten los diversos proyectos de inversión tanto privada como pública que han sido anunciados gracias al clima de confianza y el panorama favorable de la República Dominicana.
Política monetaria e inflación
En cuanto al comportamiento de los precios internos, la variación mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) fue de 0.64 % en junio de 2022, situando la inflación interanual medida desde junio de 2021 hasta junio 2022 en 9.48 %. Resulta importante destacar que, similar a lo ocurrido en las demás economías del mundo, la dinámica reciente de la inflación continúa reflejando el impacto de choques externos que han sido más persistentes de lo previsto, asociados a las disrupciones en las cadenas de suministros y al incremento de los precios del petróleo y otras materias primas que son insumos importantes para la producción local, lo cual se ha exacerbado debido a la invasión de Rusia a Ucrania. En adición, la inflación doméstica ha estado influenciada por los efectos de segunda vuelta de estos componentes externos, en la medida que la demanda agregada se ha recuperado de forma notable con relación a los niveles previos a la pandemia.
En este contexto, el BCRD mantiene el proceso de normalización monetaria, a través de incrementos en la tasa de política monetaria (TPM) y de reducción del excedente de liquidez del sistema financiero, con el cual ha revertido la postura expansiva implementada durante la pandemia. En ese sentido, en la reunión del mes de julio de 2022, se incrementó la TPM en 50 puntos básicos, de 7.25 % anual a 7.75 % anual, para un aumento acumulado de 475 puntos básicos desde noviembre de 2021. Asimismo, se ha disminuido de forma importante el excedente de liquidez del sistema financiero por medio de las operaciones de mercado abierto y el retorno de los recursos otorgados bajo el programa de expansión monetaria implementado por la autoridad monetaria y financiera durante la pandemia a través de los intermediarios financieros.
Estas decisiones de política monetaria se han implementado con el objetivo de contrarrestar las presiones inflacionarias, evitar riesgos de sobrecalentamiento de la economía, así como un deterioro del diferencial con respecto a las tasas de interés externas que pueda provocar volatilidad en el flujo de capitales.
De esta manera, se ha logrado acelerar el mecanismo de transmisión de la política monetaria a través del ajuste en las tasas de interés domésticas, las cuales aún se mantienen por debajo de la prepandemia en el caso de la tasa de interés activa, así como una moderación significativa en el crecimiento de los agregados monetarios. Las medidas implementadas facilitarían la convergencia de la inflación general al rango meta de 4.0 % ± 1.0 % durante el horizonte de política monetaria.
Cabe destacar que las economías avanzadas, como Estados Unidos de América, Reino Unido, Canadá y la Zona Euro, también han adoptado una postura de normalización de la política monetaria. Igualmente, la mayoría de los bancos centrales de América Latina han realizado incrementos significativos en sus tasas de referencia con el propósito de contener las presiones sobre los precios y propiciar la convergencia de la inflación hacia los objetivos establecidos en los respectivos esquemas de política monetaria de cada país.
En este sentido, se verifican aumentos en Argentina (2,200 puntos básicos), Brasil (1,125 puntos básicos), Chile (925 puntos básicos), Paraguay (725 puntos básicos), Colombia (725 puntos básicos), Costa Rica (675 puntos básicos), Perú (575 puntos básicos), Uruguay (525 puntos básicos), México (350 puntos básicos), Nicaragua (100 puntos básicos) y Guatemala (50 puntos básicos).
En otro orden, la política fiscal se ha caracterizado por el dinamismo de las recaudaciones, que se expanden en torno al 17 % interanual al cierre de junio. Estas mayores recaudaciones han otorgado el espacio necesario para aplicar subsidios y otras medidas orientadas a mitigar el impacto de los mayores precios internacionales de las materias primas sobre la producción nacional y los hogares, especialmente los más vulnerables.
Sector externo
En cuanto al sector externo, este exhibe un comportamiento favorable sostenido, a pesar de las condiciones adversas persistentes en el entorno internacional. Por una parte, las exportaciones totales de bienes durante el primer semestre de 2022 presentaron un crecimiento de 16.5 % respecto al mismo período de 2021, que representa un aumento de US$991.4 millones.
Este incremento se explica por el desempeño de las exportaciones de zonas francas, que fueron superiores en 14.6 %, impulsadas por las manufacturas de equipos médicos y quirúrgicos, confecciones textiles y joyería, con expansiones de US$210.2 millones (23.7 %), US$99.8 millones (23.8 %) y US$34.0 millones (9.4 %) respectivamente. Las exportaciones nacionales, a su vez, registraron un repunte de 18.9 %, principalmente en el sector industrial, con una variación de 54.1 %, destacándose las varillas de acero, al crecer US$50.0 millones (156.7 %), y los productos químicos en US$26.5 millones (35.2 %). Vale resaltar que, dentro del sector minero, las exportaciones de ferroníquel subieron en US$86.4 millones (46.9 %).
Al mismo tiempo, las remesas alcanzaron los US$4,861.1 millones para el período enero-junio, exhibiendo una ligera disminución de 7.6 % interanual, pero superando en 40.6 % al 2019, lo cual indica que al cierre de 2022 alcanzaríamos unos US$10,000 millones por este concepto. Vale destacar que, durante el mes de junio se recibieron US$803.8 millones, lo cual supera el promedio recibido mensual en los años previos a la pandemia de alrededor de US$500 millones.
En el primer semestre de 2022, los ingresos de turismo registraron US$4,121.5 millones, un incremento interanual de 92.5 %, lo cual es un claro indicador de la recuperación que experimenta actualmente el sector, con lo que lograríamos unos US$8,400 millones este año.
En cuanto a las importaciones, en el semestre enero-junio crecieron 36.6 %, dentro de las cuales, las no petroleras aumentaron 27.4 %, muestra de una reactivada demanda de insumos para la producción y bienes de consumo final.
Resulta importante destacar que una señal de la confianza de los inversionistas en la estabilidad económica, política y clima de paz social del país, es que la inversión extranjera directa, según cifras preliminares, alcanzó la suma de US$1,870.9 millones entre enero y junio de 2022, para una expansión de 8.0 % respecto al mismo período de 2021, y se estima llegaría a US$3,500 millones al finalizar el año.
La evolución positiva de las actividades generadoras de divisas, favoreció la estabilidad relativa del tipo de cambio, reflejada en una apreciación de la moneda local de 4.8 % al cierre de junio. Asimismo, se fortalecieron las reservas internacionales hasta ubicarse en torno a los US$ 14,450 millones, equivalentes a cerca de 13.3 % del PIB y unos seis meses de importaciones, superando las métricas recomendadas por el FMI.
Sistema financiero
En cuanto al sistema financiero consolidado, conforme a los datos de la Superintendencia de Bancos al cierre del mes de junio de 2022, la rentabilidad anualizada sobre el patrimonio (ROE) se ubicó en 21.9 %, mientras que la rentabilidad sobre los activos (ROA) fue de 2.5 %. Asimismo, el cociente de liquidez fue de 22.9 % y la morosidad de la cartera de créditos fue de 1.0 %, lo que evidencia que el sistema financiero se mantiene estable con adecuados niveles de solvencia, liquidez y rentabilidad, así como un bajo nivel de riesgo de su cartera crediticia.
En relación a la banca múltiple, la rentabilidad sobre el patrimonio (ROE) se ubicó en 24.5 %, y sobre los activos (ROA) en 2.5 %, con un coeficiente de solvencia de 15.6 %, según la última información disponible, y de morosidad en 1.0 %, lo que refleja que la banca múltiple continúa estable y patrimonialmente fuerte.
Finalmente, ante las condiciones desafiantes del ámbito internacional los resultados de la economía dominicana correspondientes al semestre enero-junio de 2022 reflejan los fuertes fundamentos macroeconómicos, demostrando una notable resiliencia. En este sentido se reafirma que, conforme a los modelos de pronósticos del Banco Central, se proyecta una expansión del PIB real para el año 2022 de 5.0 %, en torno a su potencial. De cumplirse esta proyección, el PIB nominal se ubicaría en US$109,045 millones en este mismo año 2022, lo que a su vez coadyuvaría a una reducción de la relación de deuda del Sector Público Consolidado de 62.6 % del PIB en 2021, esperándose que cierre este año en torno a 59.0 % del PIB, muy por debajo del 69.1 % del PIB alcanzado en 2020.
Este desempeño de la economía de alcanzar un 5.0 % de crecimiento del PIB real en el 2022 se lograría de mantenerse los flujos de inversión pública y privada en la segunda mitad del año, así como el apoyo focalizado para atenuar el impacto de los choques de precios, principalmente de origen externo, sobre las personas más vulnerables, cuyas acciones han sido promovidas y lideradas por el presidente Luis Abinader a través de los diferentes programas sociales del Gobierno.