El dirigente de los Leones del Escogido, Albert Pujols, dejó clara su postura ante las críticas y la presión que enfrenta el equipo tras una racha negativa en la Liga Dominicana de Béisbol (LIDOM). En una declaración que muestra serenidad y madurez, el líder escarlata aseguró que no tendría problema en dar un paso al costado si así lo decide la gerencia.
“Yo no tengo ninguna presión. Aquí, si el dueño o el gerente me quieren botar, me voy para mi casa a dormir tranquilo. Creo que esta experiencia ha sido muy buena”, expresó Pujols con firmeza, al ser consultado sobre los comentarios de los fanáticos que piden su salida debido al desempeño reciente del equipo.
El Escogido, que lideraba el torneo el pasado 15 de noviembre con un impresionante récord de 15-5, ha caído al tercer lugar tras un desempeño irregular en diciembre. En los primeros siete juegos del mes, el equipo solo ha conseguido una victoria, acumulando una marca de 1-6, y ha perdido 14 de los últimos 20 encuentros.
A pesar de las dificultades, Pujols evita transmitir presión adicional a sus jugadores. “Creo que expresar cualquier presión o frustración de mi parte es ponerle presión a los muchachos, y yo creo que ellos no se merecen eso”, afirmó.
El dirigente también destacó que la gerencia continúa trabajando para reforzar el equipo, como lo demuestra la reciente incorporación del lanzador panameño Darío Agrazal, quien lanzó cinco entradas sin permitir carreras en su debut contra las Estrellas Orientales el pasado 7 de diciembre.
Pujols, conocido por su liderazgo dentro y fuera del terreno, enfatizó que su enfoque sigue siendo apoyar al equipo en esta etapa crucial de la temporada, mientras los Leones buscan recuperar la forma y mantenerse en la lucha por el campeonato.