La presidenta de la República, Raquel Peña, entregó este miércoles la Bandera Nacional a la selección nacional de fútbol que participará en la VIII Copa Mundial Femenina de Fútbol Sub-17 de 2024 que se realizará por primera vez en la República Dominicana del 16 de octubre al 03 de noviembre.
Peña se mostró entusiasmada por que la República Dominicana es sede de este evento, “me siento sumamente orgullosa cada día de ser dominicana y de decir que nosotros si tenemos un presente y un futuro que no tenemos techo para todo los que nosotros queremos alcanzar”.
Al entregar la Bandera Nacional, Peña recibió una camiseta de la Selección Nacional, el acto se llevó a cabo en el Salón Verde del Palacio Nacional.
Para el mundial se han preparado dos campos de fútbol, el estadio Olímpico Félix Sánchez en Santo Domingo y el Cibao FC en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PCMM) en Santiago, y se contará con 10 canchas de practicas, así lo informó la presidenta del Comité Organizador de los Juegos Ana Bonetti, quién agradeció el apoyo de las autoridades del Estado dominicano “este logro no hubiera sido posible sin el inquebrantable apoyo del presidente Luis Abinader y la vicepresidenta Raquel Peña quienes han estado a nuestro lado en cada paso que damos en ese emocionante proceso”.
Mientras que el ministro de Deportes, Kelvin Cruz, resaltó los trabajos de remozamiento del estadio Olímpico Félix Sánchez por parte del Mimisterio de Viviendas y Edificaciones al mismo tiempo destacó la importancia de este torneo “la Copa Mundial de Fútbol Femenino Sub-17 es de verdad una de las proezas más grandes que hemos tenido nosotros y que hemos puesto al mundo a mirar para la República Dominicana”.
La dirigente del equipo dominicano Betzaida Ubri, señaló que darán el todo por el todo y que han trabajado duro para representar el país dignamente “para demostrarles al mundo que la República Dominicana también juega fútbol, vamos con todo” expresó.
República Dominicana albergará por primera vez en su historia una Copa Mundial organizada por la FIFA. Además será la tercera edición del torneo que se disputa en territorio de la Concacaf, después de los mundiales de 2010 y 2014.