Los máximos jerarcas de la FIFA auguran el miércoles que el Mundial Femenino de Nueva Zelanda y Australia romperá récords de audiencia y presencia de público en los estadios, en una señal del crecimiento del fútbol de mujeres.
“Los ojos del mundo estarán aquí. Esperamos un cuarto de la población mundial, 2.000 millones de personas, que verán al menos un partido”, destacó la secretaria general de la FIFA, Fatma Samoura, en conferencia de prensa en Auckland.
Samoura habló acompañado del presidente de la FIFA, Gianni Infantino, en vísperas de la inauguración del torneo en los dos países de Oceanía.
“Este torneo será el primer Mundial Femenino organizado por dos confederaciones, el primero en el hemisferio sur, el primero con 32 equipos, ocho de ellos debutantes”, agregó Samoura.
Aseguró que los boletos vendidos para la copa ya exceden los del torneo de cuatro años atrás, en Francia, con 1.375.000 ya colocados y muchos más disponibles.
“Ya va a ser el Mundial Femenino con más asistencia”, remarcó Samoura.
Pero medios neozelandeses han informado de bajas ventas para los partidos en su territorio, no así en Australia, el otro país sede.
Ante ello, Infantino dirigió un mensaje específico a la población de Nueva Zelanda para que salga a apoyar al fútbol femenino.
Infantino fue consultado repetidamente sobre cómo asegurar que los premios otorgados a las jugadoras, de 30.000 dólares a cada una, lleguen realmente a ellas, pero eludió contestar argumentando que “el dinero siempre es un tema sensible”.
No obstante, aseguró que la entidad creó por primera vez un programa comercial “que nos generó cifras interesantes”, de 500 millones de dólares que permitieron cubrir los costos del torneo.
“Será un espectáculo realmente único. Mucha gente aún cree que el fútbol femenino no es un gran juego, que es una mala copia del fútbol masculino, pero cuando lo ven se dan cuenta de que es fantástico”, expresó Infantino.
“El nivel ha subido en los últimos 10 años y las mejores jugadoras están aquí”, destacó.