El astro argentino Lionel Messi llegó este martes a la ciudad estadounidense de Miami (Florida) para cerrar su fichaje con el Inter de la liga norteamericana (MLS).
Una fuente policial del pequeño aeropuerto ejecutivo de Fort Lauderdale, a las afueras de Miami, confirmó a la AFP que el capitán albiceleste aterrizó en un jet privado y abandonó la instalación, próxima al estadio del Inter.
Desde la mañana, grupos de aficionados se congregaron tanto en el aeropuerto como en el estadio para dar la bienvenida a Messi, cuya llegada ha generado una enorme expectativa en esta ciudad con gran comunidad latinoamericana.
El pasado 7 de junio, Messi anunció su intención de continuar su carrera en el Inter Miami, que tiene previsto presentar al siete veces ganador del Balón de Oro en un evento por todo lo alto en su estadio el próximo domingo.
En el último mes, la franquicia copropiedad de David Beckham y Messi vienen trabajando en formalizar el contrato del argentino, que se estima que le reportará unos 60 millones de dólares anuales por las próximas dos temporadas y media.
Su debut oficial se espera para el 21 de julio en el estreno del equipo en la Leagues Cup, un torneo en el que competirán durante un mes todos los equipos de la MLS y la liga mexicana.
Desde que terminó su contrato con el Paris Saint-Germain el mes pasado, Messi estuvo en Argentina participando en los homenajes a Maxi Rodríguez y Juan Román Riquelme y también pasó recientemente unos días de vacaciones junto a su familia en Bahamas.
“Messi significa todo”
En los alrededores del estadio DRV PNK (18.000 espectadores), que en 2025 será sustituido por un nuevo y mayor recinto, una veintena de hombres, mujeres y niños aguardaban ilusionados la llegada de su ídolo.
“Te estamos esperando ‘Messias'”, se leía en una de las pancartas que prepararon junto a una figura de Messi de cartón a tamaño real.
Uno de esos aficionados, Julio Iglesias, fundó el grupo de hinchas ‘Messias 305’ cuando supo del fichaje del argentino por el equipo de la MLS, una liga a la que hasta ahora dedicaba apenas atención.
“Para nosotros, que venga Messi significa todo, donde él va hay siempre una felicidad terrible”, dijo Iglesias, de 42 años. “Es como tener a mamá y a papá, es la familia, las palabras no me alcanzan”.
Un acuerdo complejo
Messi, de 36 años, provocó todo un terremoto en el mundo del fútbol al anunciar su intención de unirse al Inter Miami, desechando así la oferta del adinerado fútbol saudita y la posibilidad de un retorno al Barcelona.
La firma del contrato con el Inter, sin embargo, se viene demorando debido a la complejidad de un acuerdo en el que estarían involucrados otros dos socios comerciales, Apple y Adidas.
A través de su plataforma Apple TV+, el gigante tecnológico estadounidense comenzó esta temporada a retransmitir la MLS a nivel global, con un contrato por 10 años valorado en 2.500 millones de dólares.
Ávido por impulsar su inversión con el futbolista más popular del planeta, Apple habría ofrecido al campeón mundial albiceleste un porcentaje de los beneficios generados por nuevos suscriptores a su pase de temporada de la MLS.
Por su parte Adidas, patrocinador vitalicio de Messi y también de la MLS desde su creación en 1996, compartiría también el incremento de ganancias por el aterrizaje del astro.
Además del salario, el Inter reforzó su propuesta dando al argentino la opción de que adquiera una participación de la franquicia tras su retirada.
Las negociaciones se inspiran en el acuerdo con el que Los Angeles Galaxy logró reclutar a Beckham a su salida del Real Madrid en 2007.
El inglés, cuya llegada a Estados Unidos supuso un gran espaldarazo para la MLS, se ganó el derecho a adquirir acciones de una nueva franquicia que terminó siendo precisamente el Inter Miami.
Ahora Beckham y su socio Jorge Mas, copropietario y gerente de la franquicia, tratan de arropar a Messi con viejos conocidos para que reimpulse a un equipo que luce resultados muy discretos en sus cuatro años de vida en la MLS.
Último de la Conferencia Este con 18 puntos en 21 partidos, el Inter ya ha anunciado la contratación del veterano mediocampista español Sergio Busquets y negocia la del lateral Jordi Alba, ambos ex compañeros de Messi en el Barcelona.
Gerardo ‘Tata’ Martino, quien entrenó a Messi tanto en el Barcelona como en la selección argentina, asumió esta semana las riendas del banquillo de Miami tras acabar su etapa con la selección mexicana.
Culminado el fichaje más sonado de su historia, la MLS confía en recibir un impulso y atención internacionales sin precedentes a tres años del Mundial que Estados Unidos coorganizará junto a sus vecinos Canadá y México.