La NBA abrió una investigación sobre la decisión de los Dallas Mavericks de dejar fuera a numerosos jugadores del decisivo partido del viernes ante los Chicago Bulls, en el que se jugaban sus últimas opciones de clasificar al repechaje a playoffs.
“La NBA inició hoy una investigación sobre los hechos y circunstancias que rodearon las decisiones sobre la plantilla de los Dallas Mavericks y su conducta en el partido de anoche entre los Chicago Bulls y los Mavericks, incluyendo la motivación detrás de esas acciones”, dijo el portavoz de la NBA Mike Bass en un comunicado emitido el sábado.
Aunque sus posibilidades habían disminuido drásticamente, los Mavericks aún podían auparse al décimo lugar de la Conferencia Oeste, el último que da acceso al repechaje (‘play in’), en caso de ganar a los Bulls y el domingo a los Spurs.
La franquicia texana, sin embargo, decidió a última hora dar la baja a cinco jugadores para el partido ante los Bulls, en un movimiento que expertos y aficionados interpretaron como un intento deliberado por perder y favorecer sus opciones de cara a la lotería del Draft.
Entre esos jugadores estaban Kyrie Irving, la gran figura del equipo junto a Luka Doncic, y el alero titular Tim Hardaway Jr., además de piezas importantes del banquillo como Christian Wood, Josh Green y Maxi Kleber.
Poco antes del partido, el entrenador Jason Kidd avanzó que incluso Luka Doncic, quien pugnaba por superar a Joel Embiid (Sixers) como máximo anotador de la temporada, solo jugaría el primer cuarto.
Kidd dijo a periodistas que las medidas provenían del dueño de la franquicia, Mark Cuban, y la dirección deportiva.
“Son decisiones que a veces son difíciles en este negocio”, afirmó Kidd tras el juego. “Estamos tratando de construir un equipo campeón. Esto es tal vez un paso atrás pero esperamos que nos empuje hacia adelante”.
Los Mavericks, que el año pasado llegaron a las Finales de conferencia, acabaron cayendo ante Chicago por 115-112 y certificaron el enorme fracaso de su apuesta por fichar en febrero al controvertido Irving.
Observadores de la NBA atribuyeron el movimiento de Dallas a un intento por proteger su selección de primera ronda en el próximo Draft.
Los Mavericks deben una primera ronda a los Knicks como parte del traspaso por Kristaps Porzingis en 2019. Pero puede conservar esa elección si quedan entre los 10 primeros en el sorteo del Draft, para lo cual les conviene acabar la temporada en el peor puesto posible.
Las reglas de la NBA incluye medidas contra este tipo de prácticas, conocidas como ‘tanking’. Al igual que los Mavericks, muchos otros equipos de la liga han sentado a sus mejores jugadores en las últimas semanas.