La idea de FIFA es que se pueda tener más tiempo efectivo de juego y se plantea dos opciones para lograrlo, una de ellas es pasar a un reloj que se detenga cada vez que se interrumpe el partido
Son varios los cambios que FIFA viene aplicando en el fútbol año tras año buscando mejorar el juego, uno de los últimos y más polémicos fue el offside semiautomático que se estrenó en la Copa del Mundo en Qatar.
Otra novedad que se estrenó en el Mundial fue la del tiempo añadido, pues se trató de que hubiera el mayor tiempo efectivo de juego, por lo que pudimos ver partidos de hasta 14 minutos de tiempo agregado, situación que tuvo opiniones encontradas.
Ahora FIFA intenta buscar una solución para evitar las perdidas de tiempo efectivo de juego en los partidos y evalúan entre dos opciones posibles.
La primera sería la antes mencionada y que se vio en el Mundial; reponer la cantidad de tiempo que se haya perdido durante el partido sin importar la cantidad, así podremos ver partidos con 9 u 15 minutos de añadido.
La otra solución sería pasar a un cronómetro como en el baloncesto e incluso como en el futsal, el cual se detiene cada vez que el partido se interrumpe bien sea por una falta, penal, sustitución, saque de banda o saque de esquina; así el partido terminaría justo al llegar el reloj a los 45 u 90 sin tiempo de reposición.
Por ahora no está tomada la decisión, pero la idea sería que los jugadores eviten perder tiempo de juego tirándose al piso o retrasando un cambio, de esta manera bien sea añadiendo todo el tiempo perdido sobre el final, o parando el reloj ante cualquier interrupción, se estaría jugando los 90 minutos completos.
Fuente: Diario NY