Los Charlotte Hornets de la NBA, franquicia propiedad de Michael Jordan, anunciaron el viernes el regreso del veterano entrenador Steve Clifford para dirigir a un equipo que lleva seis años sin clasificar a playoffs.
“Estamos encantados de dar la bienvenida a Steve de nuevo a nuestra franquicia”, dijo en un comunicado el presidente deportivo del equipo, Mitch Kupchak. “Creemos que su experiencia previa y su filosofía de entrenamiento le convierten en el mejor entrenador para nuestro equipo”.
Clifford, de 60 años, dirigió a los Hornets entre 2013 y 2018 y estaba apartado de los banquillos desde que en 2021 cerró una etapa de tres temporadas en los Orlando Magico.
Esta contratación acaba con una larga y accidentada búsqueda del sustituto de James Borrego, quien fue cesado el 22 de abril después de la eliminación de los Hornets en el repechaje a playoffs (‘play in’).
Este mes, Charlotte llegó a un acuerdo con Kenny Atkinson para que asumiera su banquillo pero el técnico cambió de parecer y decidió continuar como asistente en los Golden State Warriors, flamantes campeones de la NBA.
Los Hornets dieron un salto de calidad la pasada campaña con un núcleo de jóvenes figuras liderado por el base LaMelo Ball y el alero Miles Bridges.
Por primera vez desde 2016, el equipo logró un balance ganador (43-39) y concluyó en el décimo lugar de la Conferencia Este.
“Estoy contento de volver a Charlotte, y quiero dar las gracias a Michael Jordan, Mitch Kupchak y Buzz Peterson por esta oportunidad”, dijo de su lado Clifford. “Este es un equipo joven y excitante con muchas piezas de talento”.
El técnico, que tiene un balance en su carrera de 292 victorias y 345 derrotas, ha vivido algunos problemas de salud en los últimos años.
En 2013 fue operado del corazón por problemas arteriales y durante la temporada 2017-2018, cuando entrenaba a Charlotte, tomó un descanso de seis semanas de sus responsabilidades a causa de severos dolores de cabeza.
En marzo de 2020 Clifford tuvo que abandonar un partido entre sus Orlando Magic y los Minnesota Timberwolves al sufrir mareos.