Sin espacio en el roster de Grandes Ligas, los Padres designaron para asignación al dominicano Robinson Canó la semana pasada, con la esperanza de mantenerlo dentro de la organización.
El viernes, su deseo se hizo realidad. Canó firmó un acuerdo de liga menor con el club y se integrará a la filial Triple-A El Paso.
“Quiere tener turnos consistentes allí”, dijo el manager de los Padres, Bob Melvin. “Hablé con él. No estaba teniendo muchos turnos ni en Nueva York y ni aquí. Le encanta estar acá con los chicos y encaja bien. Lo último que quieres es rendirte pensando: ‘Oye, si recibo algunos turnos, puedo demostrar que aún tengo en el tanque’”.
Canó tiene un amplio historial como uno de los mejores intermedistas de su generación, con un promedio de por vida de .301 y ocho convocatorias al Juego de Estrellas. Pero apenas batea .149 con OPS de .371 en 77 veces al bate en esta temporada, entre los Mets y Padres.
Si Canó hace un impacto en El Paso, es posible que se reintegre al equipo grande en algún momento. Los Padres ciertamente se beneficiarían de un bate zurdo de poder.
