AFP.- ¡Lionel Messi está en el mercado! Tras no renovar con el FC Barcelona, quien dio inicio este viernes a “la era post-Messi”, el astro argentino atrae las miradas del fútbol europeo. Y mientras el París Saint-Germain reconoce “trabajar para mejorar el equipo”, el Manchester City asegura “por el momento” que no piensa en este fichaje galáctico.
Al día siguiente del sorprendente anuncio del adiós del ganador de seis Balones de Oro, que conmocionó al planeta fútbol, las réplicas del sismo siguen agitando el continente.
La pregunta del millón es la siguiente: ¿dónde aterrizará el rosarino, de 34 años, después de más de 20 años de fidelidad a un solo club, el Barça?
Son pocos los clubes que disponen del poderío financiero suficiente para fichar al menudo atacante, cuyo contrato no pudo renovar el cuadro azulgrana, con unas pérdidas pronosticadas de casi 500 millones de euros (589 millones de dólares) en la temporada 2020/2021, más del doble de lo previsto.
En París, el interés del PSG nunca ha sido un secreto. “El club trabaja sobre el mercado para mejorar el equipo como sea posible y alcanzar nuestros objetivos”, dijo este viernes en rueda de prensa Mauricio Pochettino, entrenador de la formación capitalina.
“Sabemos lo que pasó ayer (jueves)”, comentó el argentino, despejando el tema en dirección a Nasser Al Khelaifi: “Nuestro presidente está trabajando para ver cómo mejorar al equipo”.
Recordando la amistad entre Messi y la estrella brasileña Neymar, la prensa francesa habló de un posible interés del PSG. Propiedad del potente fondo catarí QSI, es uno de los pocos clubes que puede recibir a Messi y su inmenso salario estimado en 138,8 millones de euros brutos (74,9 millones de euros netos; 88,1 millones de dólares netos) cada año, sin contar los derechos de imagen, según el diario español El Mundo.
– Baile de pretendientes –
El Manchester City y sus ricos dueños emiratíes, menos penalizados que otros clubes por la pandemia del covid-19, también fueron citados.
El entrenador Pep Guardiola, que dirigió en el club azulgrana a Messi (2008-2012), frenó las especulaciones al día siguiente de firmar al centrocampista ofensivo inglés Jack Grealish a cambio de 100 millones de libras (117 millones de euros; 138 millones de dólares).
“Por el momento no pensamos en ello en absoluto”, afirmó el preparador español en rueda de prensa. “Grealish llevará el número 10. Grealish nos ha convencido y estábamos convencidos de que Leo se quedaría en el Barça”, agregó, evocando también el interés del City en otro delantero, el inglés Harry Kane.
En Barcelona, este baile de pretendientes se vive con resignación.
El presidente del equipo culé, Joan Laporta, compareció ante la prensa este viernes por la mañana para justificar ante los socios del club la pérdida del mejor jugador de la historia de la institución, que el mes pasado abrió su palmarés con Argentina cuando ganó la Copa América.
“Cuando hemos conocido a fondo la situación del club como consecuencia de la auditoría, da mucho respeto, y no queremos poner más en riesgo la institución”, explicó.
“Esta negociación ha terminado. No tenemos margen salarial, la gestión calamitosa de la junta anterior excedió el límite salarial”, lanzó el presidente.
Los números ahogan al Barça, que no consigue ajustarse al ‘fair play’ financiero que le exige la Liga española y tampoco le convence la millonaria entrada de un fondo de inversión en la competición, anunciado a comienzos de semana. Arrinconado, entre la viabilidad y su estrella, ha elegido salvarse.
– Messi “no está contento” –
La decisión es irrevocable, aseguró. “No quiero dar falsas esperanzas. El jugador tiene otras propuestas y había una fecha límite” para tomar esta decisión, a una semana de que empiece LaLiga.
Laporta reconoció que “la era post-Messi” iba a comenzar con “dos años” de adelanto sobre el calendario previsto por la actual directiva. “Seguimos motivados para que el Barça continúe sin Messi”, quien deja su club de siempre con 4 ‘Champions’, 10 Ligas y un total de 35 títulos, más que nadie en el FC Barcelona.
El presidente admitió que Messi “se quería quedar”. El argentino no ha hecho ninguna declaración pública por el momento.
“No está contento. Todos teníamos la intención y las ganas de que se quedara, él ahora también se enfrenta como nosotros a una realidad que no se puede cambiar. Sabe que le deseo lo mejor, a él y a su familia, vayan donde vayan”, cerró.
Queda por saber dónde.