Ninguna región logrará alcanzar la inmunidad colectiva contra el coronavirus hasta finales del 2020, afirman los especialistas de la Escuela Bloomberg de Salud Pública de la Universidad Johns Hopkins. Las aspiraciones de lograr esta inmunidad pueden llevar al colapso del sistema de salud pública.
“Como epidemiólogos de enfermedades infecciosas, queremos dejar claro que la inmunidad colectiva contra el COVID-19 no se alcanzará a nivel poblacional en 2020, salvo que se produzca una catástrofe de salud pública”, declaran los científicos de la escuela.
Pese al número impresionante de infectados de COVID-19 en todo el mundo (más de cuatro millones de momento), los estudios sugieren que no más del 2% o 4% de la población de cualquier país ha sido contagiada. Para hablar de la inmunidad colectiva, un 70% de la población debe ser portador del virus.
Sin una vacuna, por ejemplo, más de 200 millones de estadounidenses tendrían que infectarse antes de alcanzar este umbral. Aunque el ritmo actual de la pandemia de COVID-19 continúe en el país, solo para mediados del 2021 se podría alcanzar una inmunidad de grupo, y más de medio millón de estadounidenses estarían muertos para ese momento, explican los investigadores de la Universidad Johns Hopkins.
Incluso en las regiones más afectadas por la pandemia, como el estado de Nueva York, los estudios sugieren que quizás entre el 15% y el 21% de los habitantes ya han sido expuestos al virus. Pero con este porcentaje, más de 26.000 de los residentes del estado han muerto, y la cifra crece.
El COVID-19 es 100 veces más letal que, por ejemplo, la varicela. El virus es ahora la principal causa de muerte en Estados Unidos. Mata a casi 2.000 estadounidenses cada día. La varicela nunca mató a más de 150 estadounidenses en un año, agregan los investigadores a modo de comparación.
“Mientras discutimos cuándo y cómo reabrir el país por etapas, es importante entender lo vulnerables que seguimos siendo. El aumento de las pruebas nos ayudará a comprender mejor el alcance de la infección, pero está claro que esta pandemia está solo empezando a desarrollarse”, concluyen.
Al principio de la pandemia, algunas autoridades se opusieron a las restricciones severas y optaron por formar una inmunidad colectiva. Este enfoque fue adoptado por el Reino Unido y Suecia. No obstante, en la segunda mitad de marzo, Londres introdujo amplias medidas restrictivas por no funcionar su enfoque anterior. Suecia continúa sin implementar restricciones de confinamiento.
Fuente: Sputnik