En un acto celebrado en los salones de un hotel de la capital, junto a un grupo de dirigentes, Guido Gómez Mazara oficializó su respaldo a la candidatura presidencial de Luis Abinader convencido de que en la actual coyuntura él representa el cambio que el país necesita y es el aspirante de mayor potencialidad para impulsar las reformas políticas, sociales y económicas impostergables.
Para el abogado, profesor universitario y dirigente político, la sociedad está hastiada del PLD porque sus actuaciones desde el poder generaron cansancio en sectores esenciales de la sociedad impactados por la falta de seguridad ciudadana, el aberrante endeudamiento, los escándalos de corrupción, los bajos salarios, la caricaturización de la institucionalidad democrática y la desagradable práctica de utilizar procedimientos indecorosos contra todos los disidentes a la gestión gubernamental.
Señaló que el oficialismo posee una fatal tendencia autoritaria y de una enorme vocación por atemorizar a sectores opositores que adquiere categoría impropias del siglo 21 y con fascinación de hacer del desquite, resentimiento y retaliación, modalidades de respuestas de una administración que no tolera las discrepancias, provocando un retroceso lamentable en la cultura democrática.
Gómez Mazara señaló que concluyó un ciclo partidario que, en principio no se entendió, pero cuando desde el poder se transformó al PRD en una caja de resonancia de la agenda del PLD, junto a un grupo de dirigentes dieron una larga batalla, evitando a toda costa que el administrador de las siglas en la etapa de degradación de la organización no desdibujara tantos años de luchas, convirtiéndolo en un partido chiquito para grandes negocios y transformando el histórico respaldo electoral en fuente de escarnio y vergüenza.
Recordó que el “tiempo ha sido su mejor aliado” porque una gran parte de la sociedad entendió que sus luchas en el ámbito de la formalidad legal sirvieron para desmontar todo el tinglado PLD-TSE-PRD que, dicha instancia electoral, temerosa del poder garantizaba fallos para perpetuar en manos obedientes al oficialismo pero la inteligencia de la ciudadanía respondió colocando al partido blanco en la insignificancia electoral
Finalmente, reiteró su compromiso con los valores democráticos y saluda el ayudar a la victoria electoral de un miembro de su generación como Luis Abinader que tendrá la tarea de devolverle a la actividad política los niveles de adecentamiento anhelados por toda la nación.