El ministro de Educación, Antonio Peña Mirabal, encabezó este lunes el cierre de la Semana de Simulacros realizada en más de 3 mil centros educativos, como parte del Plan de Gestión de Riesgo que se desarrolla permanentemente a nivel nacional, con el objetivo de educar a estudiantes, docentes y personal administrativo ante la posible ocurrencia de algún desastre natural.
Peña Mirabal, destacó la disciplina y colaboración de todos los actores en los planteles educativos para alcanzar el mayor éxito en el plan de orientación que diseñó la Dirección de Gestión Ambiental y de Riesgo del MINERD, con el concurso del Centro de Operaciones de Emergencias (COE).
“Este simulacro tiene el propósito de entrenar a la comunidad educativa para preservar y garantizar la vida de estudiantes, profesores y el personal administrativo en las escuelas sus hogares en caso de que se produjera un temblor de tierra, un incendio y cualquier otro evento que pudiera poner en peligro la vida de ustedes”, dijo Peña Mirabal al observar el operativo de simulacro en el Hogar Escuela Santa Rosa de esta capital, donde alrededor de 500 estudiantes reciben docencia, bajo la orientación de las religiosas Hijas de la Caridad San Vicente de Paul.
El funcionario declaró que los simulacros se llevarán a cabo en los restantes planteles escolares durante el transcurso de este año para abarcar las 7 mil escuelas públicas que componen todo el sistema educativo nacional.
Precisó que los mismos persiguen que en cada centro educativo se pongan en prácticas estrategias de emergencias para dar respuesta rápida ante un posible terremoto, tsunami, incendio, inundaciones o accidentes de infraestructura.
Peña Mirabal, explicó que los planteles que se construyen en el marco del Programa Nacional de Edificaciones Escolares iniciado por el presidente Danilo Medina a partir del año 2012, han sido levantados con la normativa establecida por el Ministerio de Obras Públicas (MOPC) para garantizar su resistencia ante cualquier movimiento telúrico que se presente, mientras que los más antiguos están siendo evaluados para su reforzamiento y otras medidas que sean necesarias para garantizar la seguridad en cada uno de esos espacios.
Durante los simulacros, los estudiantes, docentes y personal administrativo fueron adiestrados frente a sismos y cualquier otro fenómeno natural, evento que se ha realizado de manera simultáneas en más de 3 mil centros educativos del país, durante la Semana de Simulacros Escolares del Plan de Gestión de Riesgo del MINERD.
Las acciones permiten que los alumnos, maestros y personal administrativo estén bien entrenados para actuar correctamente ante un sismo u otro fenómeno de la naturaleza, tanto en las escuelas como en los hogares, ayudando además a fomentar la cultura de protección civil entre los miembros de la familia y de la comunidad.
La Semana de Simulacros Escolares del Plan de Gestión de Riesgo, se realizó desde el pasado 14 del mes en curso y culminó este lunes 20 en la Escuela Rosa Duarte, del Distrito Nacional, con la presencia del Ministro de Educación, Antonio Peña Mirabal.
El funcionario de la cartera educativa, estuvo acompañado de Henry Santos, director del Gabinete Ministerial; Adolfo Cedeño, de Mantenimiento de Edificaciones Escolares; el coronel Jiovanny Gil Suárez, director de la Policía Escolar, así como la directora del plantel Miguelina López, y decenas de técnicos de la DIGAR.
Peña Mirabal, anunció que la tarea de orientación continuará mensualmente en cada plantel escolar, con apoyo de los Cuerpos de Bomberos, la Defensa Civil, la Policía Escolar y de toda la comunidad educativa.
Durante los simulacros, donde se recreó un sismo real, con escombros tirados en el piso, personas desmayadas, heridos y derrumbes, los estudiantes al activarse la alarma procedieron a resguardar su integridad fisca, realizando la maniobra de autoprotección, “cúbrete, agáchate y protégete”, como el primer paso del protocolo de simulacro anti sismo.
De inmediato, en orden y calma los estudiantes salieron del aula para dirigirse a los puntos de reunión señalados previamente por el personal asignado en cada plantel, donde pasaron lista de asistencia.
Los alumnos se mostraron muy entusiasmados y colaboradores durante todo el evento de prevención sísmica, demostrando su capacidad de acción ante un fenómeno de esta naturaleza. Cada estudiante respondió de manera rápida a las indicaciones de quienes los dirigían involucrándose completamente en el proceso preventivo.