Irán asumió la responsabilidad del siniestro del avión ucraniano Boeing 737, derribado por accidente el 8 de enero en Teherán con casi 180 personas a bordo. Lamentablemente, el mundo recuerda varios casos en los que las naves comerciales fueron víctimas involuntarias de la escalada de tensiones entre naciones.
Estos fueron los cinco más trágicos.
El derribo del DC-9-15 de Aerolinee Itavia (27 de junio de 1980)
Irán asumió la responsabilidad del siniestro del avión ucraniano Boeing 737, derribado por accidente el 8 de enero en Teherán con casi 180 personas a bordo. Lamentablemente, el mundo recuerda varios casos en los que las naves comerciales fueron víctimas involuntarias de la escalada de tensiones entre naciones.
Estos fueron los cinco más trágicos.
El derribo del DC-9-15 de Aerolinee Itavia (27 de junio de 1980)
Un avión DC-9-15 de la compañía aérea italiana Aerolinee Itavia, que cubría la ruta de Bolonia a Palermo, explotó cerca de la isla de Ustica, en Sicilia. Los 77 pasajeros a bordo de la aeronave, entre ellos 13 niños, fallecieron en el accidente.
Entre las posibles causas de la tragedia figuran el impacto de un misil de la OTAN, disparado por error durante una maniobra, y un combate aéreo entre cazas que acompañaban un avión en el que supuestamente viajaba el entonces líder libio Muamar Gadafi, y aviones de la Alianza.
Además, pudo haber sido un acto terrorista: una investigación independiente que concluyó en 1994 afirmó que la explosión se debió a una bomba instalada en un lavabo. Sin embargo, ninguna de las partes se pronunció al respecto.
El ataque contra un Boeing surcoreano (1 de septiembre de 1983)
Un Boeing 747-2B5B de Korean Airlines que volaba desde Nueva York hacia Seúl cambió la dirección de la ruta y violó el espacio aéreo de la URSS sin establecer contacto con los aviones de inteligencia.
Como resultado, fue derribado por un Su-15 y cayó al suroeste de la isla de Sajalín. Murieron los 246 pasajeros —entre ellos el congresista Larry McDonalds— y los 23 miembros de la tripulación. La investigación del accidente mostró que los pilotos surcoreanos no estaban al tanto del desvío y tampoco pudieron ver el caza interceptor soviético.
Para evitar que se repitiese la tragedia, la Administración Reagan permitió el uso civil del sistema de navegación por satélite militar GPS.
El siniestro del Airbus de Iran Air (3 de julio de 1988)
Un avión de pasajeros Airbus A300 B2-203 perteneciente a la compañía Iran Air fue derribado en las aguas territoriales iraníes, en el golfo Pérsico, por un misil lanzado desde la fragata estadounidense Vincennes, que patrullaba el estrecho de Ormuz: los militares lo identificaron por error como un F-14 iraní. La tragedia se llevó la vida de casi 300 personas.
EEUU pagó a Irán más de 100 millones de dólares en indemnizaciones, pero se negó a asumir la responsabilidad de lo ocurrido.
El accidente del Tu-154M ruso sobre el mar Negro (4 de octubre de 2001)
Los 66 pasajeros y 12 miembros de la tripulación murieron cuando un Tu-154M de la compañía aérea Sibir, que volaba de Tel Aviv (Israel) a Novosibirsk, se estrelló sobre el mar Negro, a unos 200 kilómetros de Sochi.
Los datos de la investigación realizada por la Comité Interestatal de Aviación mostraron que la aeronave fue alcanzada por un misil ucraniano, lanzado erróneamente durante una maniobra militar. En 2003, las autoridades del país indemnizaron a las familias de todas las víctimas de la catástrofe.
La catástrofe del vuelo MH17 en el este de Ucrania (17 de julio de 2014)
El vuelo MH17 de la compañía Malaysia Airlines que se dirigía de Ámsterdam a Kuala Lumpur fue derribado por un sistema de misiles Buk en el este de Ucrania, una zona de combate entre las tropas ucranianas y las milicias de Donbás. Las 298 personas a bordo de la aeronave —la mayoría de ellas holandeses— resultaron muertas. El Ejército ucraniano y las milicias se acusaron mutuamente de la catástrofe.
El derribo del avión de Malaysia Airlines se convirtió en uno de los accidentes aéreos más graves de la historia. Una investigación llevada a cabo por Rusia estableció que el misil con el que fue derribado el vuelo MH17 pertenecía al Ejército ucraniano. Por su parte, el jefe del Departamento de Investigaciones de la Policía nacional holandesa, Wilbert Paulissen, afirmó que fue un misil ruso.
En diciembre de 2019, las autoridades ucranianas prorrogaron hasta el 1 de agosto de 2020 el trabajo de la misión para investigar el derribo del MH17.
Fuente: Sputnik