El gobierno de Estados Unidos inaugurará hoy un centro temporal de detención para migrantes en plena zona pantanosa de los Everglades, en Florida, generando una ola de críticas por su ubicación y condiciones. Apodado “Alligator Alcatraz”, el complejo está siendo construido en el antiguo aeropuerto Dade-Collier, a menos de 80 kilómetros del resort del presidente Donald Trump en Miami.
La instalación, que podrá albergar hasta 5,000 migrantes mientras esperan su deportación, está rodeada por humedales y caimanes. El gobernador Ron DeSantis defendió la medida, asegurando que el entorno natural aporta seguridad y reduce costos operativos. “Si alguien se escapa, tendrá que enfrentarse a un montón de caimanes”, afirmó.
Sin embargo, el proyecto ha generado rechazo entre defensores de derechos humanos, ambientalistas y comunidades indígenas locales, quienes denuncian que el campamento atenta contra territorios sagrados y representa un trato inhumano hacia los migrantes. Se espera que el presidente Trump visite la instalación esta semana.









