Escalada en la guerra comercial: el presidente estadounidense Donald Trump subió al 20% los aranceles a China, que replicó; y dejó expirar la pausa en las tarifas aduaneras a México y Canadá, con lo que entran en vigor este martes.
A falta de un acuerdo, Trump advirtió que las tarifas aduaneras del 25% a los bienes de sus vecinos y socios en el acuerdo de libre comercio de América del Norte, el T-MEC, salvo los productos energéticos canadienses gravados a una tasa inferior, se aplicarían el 4 de marzo.
Poco antes de expirar el plazo, el magnate republicano declaró que “no hay margen” de maniobra para evitar los aranceles que impuso inicialmente el 3 de febrero, antes de pausarlos por un mes en busca de soluciones a los problemas migratorios y la entrada de drogas en Estados Unidos.
“Lo que tendrán que hacer es construir sus fábricas de automóviles (…) y otras cosas en Estados Unidos”, dijo.
– Reacción mexicana –
El gobierno de México informó este martes que alista medidas “arancelarias y no arancelarias” en represalia a los gravámenes del 25% que impuso el gobierno de Trump.
“Hemos decidido responder con medidas arancelarias y no arancelarias que anunciaré en plaza pública el próximo domingo”, declaró la presidenta Claudia Sheinbaum durante su habitual rueda de prensa matutina.
“No es de ninguna manera el propósito iniciar una confrontación económica o comercial que desafortunadamente es lo opuesto a lo que deberíamos estar haciendo, es decir, integrar más nuestras economías”, añadió.
México entregó la semana pasada a Estados Unidos a algunos de los capos de la droga encarcelados más conocidos y desplegó a miles de militares en la frontera durante las últimas semanas, entre otras medidas, en un intento de evitar los aranceles.
La presidenta aseguró que “no hay motivo, razón, ni justificación” que soporte la decisión del gobierno de Trump de imponer aranceles a México.
“Lo hemos dicho de diferentes formas, cooperación y coordinación sí, subordinación e intervencionismo no. A México se le respeta”, enfatizó.
Los aranceles afectarán a más de 918.000 millones de dólares en importaciones estadounidenses de Canadá y México.
– Golpe a China –
Trump subió también al 20% los aranceles adicionales a China, fijados inicialmente en el 10%. Pekín respondió de inmediato, anunciando que impondrá gravámenes suplementarios del 10 y el 15% a varias importaciones alimentarias de Estados Unidos como la soja, el trigo o el pollo.
“Si Estados Unidos (…) persiste en elevar una guerra arancelaria, una guerra comercial, o cualquier otro tipo de guerra, la parte china lo combatirá hasta el final”, dijo a propósito un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Lin Jian.
Washington reprocha a China su “incapacidad” para “combatir la avalancha de fentanilo”, un opioide sintético que mata por sobredosis a decenas de miles de personas al año en Estados Unidos.
– “Amenaza existencial” –
Para Canadá, las tarifas aduaneras son una “amenaza existencial”, en palabras de la canciller Mélanie Joly. “Miles de empleos están en juego”, advirtió.
Por eso, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, avisó que si los aranceles entran en vigor su país “responderá a partir de la medianoche aplicando gravámenes del 25% sobre 155.000 millones de dólares en bienes estadounidenses”.
El gobierno canadiense asegura que menos del 1% del fentanilo y de los migrantes que entran ilegalmente en Estados Unidos lo hacen a través de su frontera, pero aún así ha intentado complacer a Trump, con un plan para mejorar la seguridad fronteriza y el nombramiento de un zar para coordinar la lucha contra el fentanilo.
Un portavoz de la Unión Europea, Olof Gill, sostuvo el martes que los aranceles a México y Canadá “amenazan cadenas de abastecimiento profundamente integradas, flujos de inversiones y la estabilidad económica a ambos lados del Atlántico”.
Por ello, pidió a Estados Unidos que “reconsidere su abordaje y en cambio trabaje por una solución basada en reglas y que sea en beneficio de todas las partes”.
– Subida de precios –
Los consumidores podrían sentir los efectos en los precios, complicando así las promesas de campaña de Trump de bajar la inflación. Los industriales ya empiezan a notarlos.
“Los aumentos de precios se han acelerado por los aranceles, lo que ha provocado retrasos en nuevos pedidos, interrupciones en los proveedores e impactos en los inventarios”, declaró Timothy Fiore, encargado de la encuesta sobre el índice ISM, que mide la actividad del sector manufacturero.
Por ahora, los aranceles impactan sobre todo a fabricantes de los sectores químico, transporte, máquinas, electrodomésticos y alimentario.