"La Monstrua, lamentaciones de la Mujer Barbuda": una obra que desafía los estándares de belleza y la condición humana

"La Monstrua, lamentaciones de la Mujer Barbuda": una obra que desafía los estándares de belleza y la condición humana

Desde el 20 de febrero, a las 8:30 pm la Sala Ravelo del Teatro Nacional Eduardo Brito se convierte en el escenario de “La Monstrua, lamentaciones de la Mujer Barbuda”, un unipersonal protagonizado por la reconocida presentadora y actriz Sabrina Gómez. 

Bajo la dirección del experimentado Carlos Espinal y la producción general de Marcos Malespín, esta obra de Primera Memoria Producciones invita al público a adentrarse en una reflexión profunda sobre la exclusión, la belleza impuesta y la monstruosidad social.

Inspirada en la vida de Julia Pastrana, una mujer barbuda exhibida en circos del siglo XIX, la obra combina elementos del teatro clásico, como el monólogo de Segismundo en La vida es sueño de Calderón de la Barca y Lady Macbeth en Macbeth de William Shakespeare, con una investigación antropológica sobre los fenómenos circenses y las mujeres barbudas.

Carlos Espinal, quien también es el dramaturgo, describe la obra como una crítica social que trasciende lo teatral para cuestionar quiénes son los verdaderos monstruos: ¿aquellos que son exhibidos o los que observan sin cuestionar?

El monólogo se desarrolla después de la muerte de la protagonista, quien, atrapada entre recuerdos de amor y abusos, busca justicia en un mundo que la condenó por su diferencia. Su tormento interno se convierte en una metáfora del conflicto entre la esencia y la apariencia, explorando cómo los estándares de belleza excluyen y marginan a quienes no se ajustan a ellos.