Begoña Gómez, la esposa del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, negó este miércoles ante la justicia haber cometido ninguna irregularidad en sus actividades profesionales privadas.
La justicia investiga si Gómez, de 49 años, se aprovechó de ser la esposa de Sánchez para conseguir dirigir en la Universidad Complutense de Madrid un máster y obtener financiación privada para el mismo. Se examina también si, a cambio de esta financiación para su curso, ayudó a un empresario a conseguir acceso privilegiado a ofertas públicas.
Asimismo, la justicia examina si, en el marco de esas actividades universitarias, cometió un delito al registrar a su nombre un programa informático creado por otros, así como la denominación del curso, Transformación Social Competitiva.
“Mi cliente se ha comportado siempre de una manera correcta, siempre en coordinación con la Universidad Complutense y en ningún momento ha intermediado, de ninguna manera, ante nadie, a efectos de que” un empresario “obtuviera licitaciones públicas”, dijo a la salida de la audiencia de este miércoles el abogado de Gómez, Antonio Camacho.
Camacho explicó que su clienta había querido declarar “desde el mismo inicio del procedimiento, porque no tiene nada que esconder”, pero que no lo había hecho “porque había una indefinición acerca de lo que se estaba investigando”.