Rusia informó el martes que había llevado a cabo ejercicios que incluían disparos de misiles, algunos de ellos hipersónicos, en el Mediterráneo oriental, en un contexto en el que su aliado sirio Bashar al Asad pierde terreno frente a una coalición de rebeldes liderada por islamistas radicales.
“Misiles de alta precisión fueron disparados al mar y al aire en el Mediterráneo oriental, en un ejercicio para probar los métodos de acción conjunta de la Marina y las Fuerzas Aéreas rusas”, indicó el Ministerio de Defensa en un comunicado.