Washington. En una ceremonia de mando realizada este jueves, el vicealmirante Alvin Holsey asumió oficialmente como nuevo jefe del Comando Sur de Estados Unidos, relevando a la general Laura Richardson, quien se retira del servicio militar tras una distinguida carrera de más de cuatro décadas.
Holsey, originario de Fort Valley, Georgia, se convierte así en el primer afroestadounidense en liderar esta unidad estratégica del ejército estadounidense, una designación que marca un hito histórico para la organización. Antes de este nombramiento, ya había servido como subcomandante del Comando Sur, acumulando una amplia experiencia en liderazgo militar.
Graduado en Ciencias Informáticas y con un máster en Gestión de Empresas, Holsey tiene una notable trayectoria en la Armada de EE.UU. Entre sus logros se destaca el haber comandado el USS Makin Island, el primer buque de guerra de propulsión eléctrica híbrida de la Armada, una innovación que refuerza la sostenibilidad de las operaciones navales. Además, fue el primer líder de la Fuerza de Tarea Conjunta Sentinel, encargada de operaciones en Oriente Medio para asegurar la libertad de navegación y la estabilidad marítima en la región.
La carrera de Holsey incluye numerosos despliegues a bordo de fragatas y cruceros de la Armada, además de misiones de vuelo en helicópteros como el SH-60B Seahawk, fortaleciendo su experiencia en operaciones marítimas y aéreas.
El legado de la general Laura Richardson
Laura Richardson, de 60 años, deja el mando y cierra su carrera militar tras ser la primera mujer en liderar el Comando Sur desde octubre de 2021. Su liderazgo estuvo marcado por un enfoque en la seguridad regional y la cooperación con aliados en América Latina y el Caribe. Durante su gestión, se llevaron a cabo diversas operaciones y ejercicios multinacionales destinados a fortalecer la capacidad de seguridad colectiva en la región y mejorar la interoperabilidad con los países socios, destacó el Comando Sur en un comunicado.
El cambio de mando en el Comando Sur también ocurre en un contexto de creciente interés de Estados Unidos por la región latinoamericana y el Caribe, en un escenario marcado por proyectos estratégicos de otros países, como el megapuerto que China construye en Perú, al que la organización ha calificado como una “instalación de doble uso”.
Holsey asume el cargo en un momento clave, con el desafío de mantener la estabilidad regional y promover la colaboración en seguridad en un contexto de cambios geopolíticos y nuevas alianzas.