El Tribunal Supremo español anunció este jueves una investigación a José Luis Ábalos, exministro y exhombre de confianza del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, vinculado a un escándalo de corrupción por la compra de material sanitario durante la pandemia.
El Supremo indicó en un comunicado que Ábalos, por años figura del círculo íntimo de Sánchez pero cesado como ministro en 2021 y expulsado en febrero pasado del Partido Socialista cuando estalló el escándalo, pudo haber incurrido en varios delitos, entre ellos malversación, cohecho y tráfico de influencias.
Ábalos, quien sigue siendo diputado en el Congreso, aunque independiente, siempre ha negado cualquier relación con la trama corrupta.
El Supremo abrió la investigación para determinar si Ábalos, ministro de Transportes de Sánchez entre 2018 y 2021, participó en los “hechos delictivos por parte de un grupo de personas (…) que aprovechan la situación de emergencia derivada de la pandemia por el covid”, según señaló el auto judicial.
Según el escrito, se intenta probar si como “compensación económica” a sus servicios, Ábalos disfrutó de una vivienda adquirida en Cádiz, Andalucía, por la empresa que recibió los contratos para proveer el material sanitario.
La empresa también habría pagado el alquiler de un apartamento en Madrid a una mujer con la que Ábalos “se encontraba, al parecer, relacionado”, indicó el auto.
La persona en el centro del escándalo de corrupción es Koldo García, un hombre de la máxima confianza de Ábalos en el Ministerio de Transportes.
García fue detenido el 21 de febrero pasado como sospechoso de enriquecerse cobrando suculentas comisiones por contratos de venta de mascarillas entre marzo y junio de 2020, unos negocios que generaron unos beneficios de 9,5 millones de euros (10,1 de dólares), según la justicia.
En un documento judicial de la investigación que publicó la prensa española, Ábalos es nombrado como un “intermediario” en la trama.
Este escándalo de corrupción ha llevado a la oposición de derecha a exigir la renuncia de Pedro Sánchez, alegando que es imposible que no tuviera conocimiento de los hechos.
En octubre, el dirigente socialista negó que hubiera cesado como ministro a Ábalos en julio de 2021 por sospechas de corrupción, sino dentro de una renovación del Ejecutivo para darle un “impulso” tras la pandemia.
El Gobierno de Sánchez también se ha visto desgastado en los últimos meses por otro caso judicial, el de su esposa, Begoña Gómez, investigada por presunto tráfico de influencias y corrupción en los negocios, sospechosa de haber aprovechado el cargo de su marido para conseguir favores de empresas, en particular de un empresario español que obtuvo ayudas públicas.