La furia del huracán “Rafael” golpeó intensamente el occidente de Cuba como un huracán de categoría 3, con vientos sostenidos de hasta 115 millas por hora, antes de perder algo de intensidad en su paso por el territorio cubano. Este fenómeno ha obligado a la evacuación de cientos de personas debido al alto riesgo de inundaciones y penetraciones del mar, que han afectado las zonas costeras de manera significativa.
La intensidad de “Rafael” causó una nueva desconexión total del Sistema Eléctrico Nacional, sumiendo a toda la isla en un apagón. Este es el tercer apagón generalizado en Cuba en los últimos dos años y el segundo en menos de un mes, lo cual subraya la vulnerabilidad de la red eléctrica cubana ante fenómenos de esta magnitud. Las autoridades locales informaron que brigadas especializadas están trabajando a contrarreloj para restablecer el suministro eléctrico en las áreas afectadas.
“Rafael” es el segundo huracán que impacta directamente en Cuba en la presente temporada ciclónica, siguiendo al devastador huracán “Óscar” que, hace pocas semanas, afectó severamente el oriente cubano. En su paso por Guantánamo, “Óscar” dejó un saldo de víctimas mortales y daños catastróficos, especialmente en infraestructuras, viviendas y cultivos.
El paso de “Rafael” por el occidente ha generado olas de más de 4 metros y lluvias torrenciales que amenazan con desbordar ríos y embalses. La situación sigue siendo monitoreada por las autoridades, que han pedido a la población permanecer en lugares seguros y seguir las indicaciones de protección civil.
Este nuevo golpe climático pone de manifiesto la fragilidad de los servicios básicos en la isla y la urgente necesidad de reforzar sus infraestructuras frente a fenómenos de esta envergadura.