Filadelfia (EE.UU.) (EFE).- El expresidente de EE.UU. Barack Obama, el legendario “Jefe” del rock Bruce Springsteen y el influyente músico John Legend unieron sus voces en Filadelfia para respaldar a Kamala Harris y advertir sobre los “riesgos” que Donald Trump representa para los valores de la clase trabajadora estadounidense.
Más que un evento político, el acto tuvo un aire de festival. No solo por sus protagonistas, sino también por el entusiasmo del público, que casi llenó los 10.000 asientos del Liacouras Center de la Universidad de Temple, en el norte de Filadelfia.
La energía del lugar era palpable, con el público ondeando pancartas de ‘Harris-Walz’, ‘Libertad’ y ‘Voten’, todas del color azul del Partido Demócrata, mientras una ola de aplausos hacía retumbar el estadio cuando hizo su aparición Obama, la gran estrella demócrata.“Hay algo que debe quedar claro: si alguien no te respeta, si alguien no te ve como un ciudadano igual, con derecho a las mismas oportunidades, a la búsqueda de la felicidad y al sueño americano, entonces no deberías votar por él”, afirmó Obama.
El expresidente acusó a Trump de querer “dividir” a Estados Unidos y fomentar el “odio” solo para aumentar sus probabilidades de ganar y lo contrastó con Harris, a quien señaló como una figura que quiere “unir” el país y que “entiende los valores de la clase trabajadora”.
“¡EE.UU. está listo para un nuevo capítulo! ¡EE.UU. está listo para la Presidencia de Kamala Harris!”, clamó Obama, con el respaldo fervoroso de la audiencia, un público diverso en edades y razas, entre los que destacaba un fuerte núcleo de amantes de amantes de Springsteen.
La conexión de Springsteen con la clase trabajadora
Entre los asistentes estaba Marie Benson, de 67 años, y quien confesó haber ido a más de cien conciertos de Springsteen a lo largo de su vida. “Siempre ha cantado para la clase trabajadora, poniéndose en el lugar de quienes trabajan duro y sintiendo su dolor”, afirmó emocionada a EFE.