Julina Staffeld, directora ejecutiva del Banco de Alimentos, alerta sobre la falta de compromiso del país en la lucha contra el hambre.
Santo Domingo.– En el marco del Día Mundial de la Alimentación 2024, que se celebra bajo el lema «Derecho a la alimentación para una vida y un futuro mejor», el Banco de Alimentos de la República Dominicana llamó a la acción para enfrentar la falta de una ley que combata la pérdida y el desperdicio de alimentos en el país. La organización advierte que esta carencia pone en riesgo los esfuerzos para reducir el hambre y la inseguridad alimentaria que afecta al 6,3% de la población y a un 22% de dominicanos en situación vulnerable.
El Banco de Alimentos RD es la organización privada más influyente en el ámbito de la seguridad alimentaria en el país, rescatando alimentos para donarlos a más de 200 organizaciones que atienden a personas con inseguridad alimentaria. Actualmente, más de 20,000 personas se benefician mensualmente de esta labor, accediendo a alimentos seguros y saludables que de otra manera serían inalcanzables debido al alto costo de la canasta básica.
Julina Staffeld, directora ejecutiva del Banco de Alimentos, destacó la creciente dificultad que enfrenta la organización para recibir donaciones de las empresas que integran la cadena de suministro de alimentos. “Es crucial que contemos con una ley que incentive y promueva las donaciones y sancione la destrucción deliberada de alimentos, una práctica común durante las huelgas o protestas”, declaró Staffeld.
El Banco de Alimentos también ha solicitado la revisión de la normativa 09-21, que actualmente incentiva la destrucción de alimentos aptos para el consumo humano si están próximos a vencer. Según Staffeld, esta regulación impone cargas impositivas a las empresas que donan alimentos más allá del 5% permitido, lo que las obliga a destruir estos productos para evitar impuestos adicionales. “Estos alimentos, en lugar de ser destruidos, podrían alimentar a las personas más vulnerables de nuestra sociedad”, enfatizó.
La pérdida y el desperdicio de alimentos no solo agravan la inseguridad alimentaria, sino que también contribuyen al cambio climático. Más del 14% de las emisiones de gases de efecto invernadero provienen de alimentos que se desperdician, acelerando así el calentamiento global y sus efectos devastadores.
Sensibilidad
En este Día Mundial de la Alimentación, el Banco de Alimentos de la República Dominicana hace un llamado a todos los sectores —empresarios, gobierno y la sociedad en general— para crear sistemas alimentarios más resilientes, responsables y sostenibles.
“Necesitamos el compromiso de todos para construir un futuro donde el acceso a la alimentación no solo sea un derecho, sino un acto de justicia”, concluyó Staffeld.
