“República Dominicana se enrumba por el camino de una -dictadura blanda- como la que existe en Bolivia con prácticas autoritarias de sectores de poder que pretenden negar los derechos políticos a elegir y ser elegible al expresidente Leonel Fernández y a grupos sociales, en violación de la Constitución y de los tratados internacionales sobre derechos humanos”.
La denuncia la hizo en Bogotá, Colombia, el abogado constitucionalista Namphi Rodríguez, en el marco del II Congreso Internacional de Justicia Constitucional de la Asociación Mundial de Justicia Constitucional y la Asociación Colombiana de Derecho Procesal Constitucional.
Rodríguez dijo que los derechos a elegir y ser elegible son “derechos superconstitucionales” que no admiten “límites indebidos” del legislador, como la “interpretación prohibitiva y tendenciosa” que se le pretende dar al artículo 49.4 de la Ley 33-18, de Partidos Políticos.
“Los derechos políticos, en su doble dimensión de elegir y ser elegible, son un coto vedado, un terreno prohibido para limitaciones irrazonables del poder político de turno; de ahí que Leonel Fernández está amparado en la Constitución para inscribir su candidatura presidencial por cualquier organización política”, dijo el jurista ante decenas de delegaciones de expertos en Derecho Constitucional procedentes de distintos países latinoamericanos.
Subrayó que la democracia presupone la existencia de una “libertad objetiva” en la que los ciudadanos deben poder elegir entre propuestas, personas y programas electorales efectivamente diferentes entre sí, dentro de una gama de alternativas lo suficientemente amplia como para permitirle a cada uno reconocerse en una orientación política.
Añadió que la salvaguardia de la democracia implica que prevalezca desde los puntos de vista formal y material el contenido del principio de igualdad y libertad política, reconocidos por el Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos, por la Convención Americana sobre Derechos Humanos y por la Constitución.
Adujo que si se reconoce el carácter normativo de la Constitución y su supremacía en el ordenamiento jurídico, las leyes de Partidos Políticos y de Régimen Electoral deben ser interpretadas armónicamente con la Carta Sustantiva, por lo que la Junta Central Electoral no necesita ser juez para inaplicar cualquier norma inconstitucional.
Asimismo, Rodríguez advirtió que República Dominicana hay un proceso progresivo de deterioro de la democracia en el que el poder irrespeta y altera las reglas del “juego político”.
“El presidente Danilo Medina, pese a que llegó por la vía democrática, se ha deslegitimado en procesos de reeleccionistas y en reformas legales regresivas para prolongarse en el poder, con signos preocupantes de irrespeto a los derechos fundamentales, por lo que parecería que estamos yendo a un modelo de dictadura blanda (dictablanda) como en Bolivia”, alertó.