Nueva York, EE.UU. – Gerardo Rodríguez, padre de la dominicana Rosanna Rodriguez, se encuentra devastado tras la trágica muerte de su hija, quien fue apuñalada presuntamente por su esposo, Wellington Leonardo, durante una disputa doméstica en Perth Amboy, Nueva Jersey. Rodríguez recordó a su hija como una persona tranquila y feliz, lamentando que su amor por Leonardo la llevara a negarse a dejarlo, lo que finalmente le costó la vida a los 40 años.
Según la fiscalía del condado de Middlesex, el incidente ocurrió en la madrugada del sábado 21 de septiembre en una residencia ubicada en la avenida Bertrand. Durante la disputa, Leonardo apuñaló repetidamente a Rosanna frente a sus cuatro hijas, de 13, 11, 3 años y una bebé de 11 meses.
La víctima fue trasladada de emergencia al hospital HMH Raritan Bay, donde falleció horas después debido a la gravedad de sus heridas.
Wellington Leonardo fue arrestado y enfrenta múltiples cargos, incluyendo asesinato en primer grado, posesión ilegal de un arma, posesión de un arma para un propósito ilegal y poner en riesgo a menores de edad, por cometer el crimen frente a sus hijas.
Wellington Leonardo fue arrestado y enfrenta múltiples cargos, incluyendo asesinato en primer grado, posesión ilegal de un arma, posesión de un arma para un propósito ilegal y poner en riesgo a menores de edad, por cometer el crimen frente a sus hijas.
Gerardo Rodríguez, en medio del dolor, expresó su sorpresa al enterarse de que su hija sufría violencia doméstica. “Esa muchacha nunca estaba brava, nunca peleaba, siempre estaba sonriendo, feliz”, comentó entre sollozos. Aunque siempre tuvo reservas respecto a la relación de su hija con Leonardo, Gerardo intentó en varias ocasiones persuadir a Rosanna para que lo dejara y comenzara una nueva vida con sus hijas, pero ella se resistió, movida por el amor que sentía hacia su esposo y su deseo de no separarlo de sus hijos.
“Lo aguantó a él, de tanto que lo quería. Y nosotros aconsejándola a ella; que él no servía, que era un teatrero, un sinvergüenza. Y (ella) siempre amando a ese hombre, por no separarlo de sus hijos, hasta que llegó a eso”, resumió el padre de la víctima.
Con el corazón destrozado, Gerardo Rodríguez lamentó que su hija nunca les confesara los problemas que tenía con Leonardo, aunque la familia conocía la verdadera naturalez del hombre que terminó arrebatán v la vida.