Nueva York fue reconocida como la ciudad con el mayor consumo de marihuana en el mundo, según el reciente informe Cannabis Global Price Index 2023, que analizó los precios y el uso de esta sustancia en 140 ciudades a nivel global.
El estudio reveló que los neoyorquinos consumen un promedio de 62.3 toneladas métricas de marihuana cada año, superando a Sidney, Australia, que ocupa el segundo lugar con un consumo anual de 55 toneladas, a pesar de que el cannabis sigue siendo ilegal en ese país. Este dato resalta la prevalencia del consumo en la Gran Manzana, especialmente tras la legalización de la marihuana recreativa y médica en mayo de 2021.
Precios globales del cannabis
En cuanto a precios, Tokio se sitúa como la ciudad con la marihuana más costosa del mundo, con un precio de $33 dólares por gramo, casi tres veces el costo promedio en Nueva York, que se ubica en $12. En EE.UU., el precio más bajo se encuentra en Portland, Oregón, donde el gramo de marihuana cuesta alrededor de $7. A nivel global, Montreal, Canadá, ofrece la marihuana más económica, a solo $5.90 por gramo.
Dentro del área tri-estatal, la ciudad de New Britain, Connecticut, tiene el precio más bajo de marihuana, con un promedio de $10.80 dólares por gramo, mientras que en Newark, Nueva Jersey, el precio ronda los $11.30. El estudio proyecta que para 2030, el costo promedio del cannabis en EE.UU. podría caer hasta los $5.61 por gramo.
Problemas asociados con el consumo
Desde la apertura de los dispensarios legales en Nueva York, ha surgido una problemática en torno a la venta sin licencia de cannabis. Según la policía local, en enero de 2023 había más de 1,300 establecimientos vendiendo marihuana de manera ilegal, lo que no solo pone en riesgo la supervivencia de los negocios autorizados, sino que también genera preocupaciones de salud pública, como incendios y robos violentos.
Además, se ha reportado un aumento de emergencias hospitalarias relacionadas con menores de edad que consumen marihuana en diversas presentaciones, como golosinas, lo que ha llevado a los pediatras a alertar sobre los efectos negativos en el cerebro en desarrollo de los jóvenes. Incluso las mascotas, especialmente perros, han sido afectadas al consumir accidentalmente productos con marihuana en las calles o en los hogares.
A pesar de la legalización, el consumo excesivo de cannabis sigue siendo un desafío para las autoridades de Nueva York, quienes intentan controlar tanto el comercio ilegal como los problemas de salud y seguridad que este conlleva.