Desde el Palacio de Miraflores, el presidente Nicolás Maduro reveló que actualmente hay 2,000 personas detenidas, quienes serán trasladadas a los centros penitenciarios de Tocorón y Tocuyito.
“Esta vez no va a haber perdón”, afirmó contundentemente, marcando una postura de cero tolerancia.
Además anunció un endurecimiento de las medidas de seguridad en Venezuela, incluyendo la continuación de los “patrullajes militares y policiales” en todo el país. En su discurso, Maduro
Además, Maduro fue claro al rechazar cualquier intento de la oposición de cuestionar su legitimidad o de “pretender usurpar” la presidencia. “No se aceptará que la oposición pretenda usurpar la presidencia de Venezuela”, subrayó, reafirmando su control sobre el gobierno y su determinación de mantener el orden.
Estas declaraciones se producen en un clima de creciente tensión política, con sectores opositores que continúan cuestionando los resultados de las elecciones que, según Maduro, lo ratifican como presidente. La comunidad internacional y los opositores han expresado su preocupación por la situación en Venezuela, mientras el gobierno se prepara para enfrentar cualquier desafío a su autoridad.