Unos 120,000 adolescentes contrajeron el VIH en el 2023

Unos 120,000 adolescentes contrajeron el VIH en el 2023

El reciente Informe Mundial sobre Sida publicado por el Programa Conjunto de las Naciones Unidas para VIH/SIDA (ONUSIDA), destaca la importancia de fortalecer los derechos humanos y aumentar los recursos para alcanzar la meta de eliminar la pandemia de sida como amenaza a la salud pública para 2030.

Bethania Betances, directora País de ONUSIDA, expresó que el informe sustenta que el acceso a medicamentos antirretrovirales ha alcanzado un hito histórico en la salud pública al reducir a la mitad las muertes por sida desde 2010, pero que de los 39,9 millones de personas que viven con el VIH en el mundo, más de 9.3 millones necesitan acceder al tratamiento.
“Este Informe plantea la urgencia de duplicar los esfuerzos para eliminar barreras de acceso a servicios de prevención y tratamiento de VIH, especialmente para poblaciones que se están quedando atrás, producto de las desigualdades y exclusión social, quienes representan el 55 por ciento de las nuevas infecciones por VIH a nivel mundial”, indicó Betances.
Señaló que, a pesar de los compromisos globales para reducir nuevas infecciones en el mundo por debajo de 370,000 para 2025, el estado del sita destaca que las evidencias indican que las cifras continúan tres veces más altas, alcanzando 1.3 millones en 2023, por lo que las decisiones que se tomen este año serán cruciales para alcanzar la meta de poner fin al sida en 2030.
Para Bethania Betances, un aspecto clave del informe está referido a que, aunque globalmente se han reducido las infecciones entre niños, persisten brechas importantes que obstaculizan los esfuerzos para eliminar el sida infantil para 2030, dado que solo el 57 por ciento de los niños de 0 a 14 años reciben tratamiento a nivel mundial.
Explicó que, acorde a la actualización de la situación mundial del sida, 120,000 adolescentes y 36,000 mujeres jóvenes contrajeron el VIH en 2023, subrayando la necesidad urgente de abordar la violencia, la discriminación de género y la eliminación de barreras legales y estructurales que afectan la salud de estas poblaciones.
La funcionaria de las Naciones Unidas, resaltó que la publicación, indica que el progreso más significativo reportado contra el VIH, se ha observado en los países que han invertido adecuadamente en respuestas al VIH y que han reformado políticas para mejorar el acceso a servicios esenciales.
Betances subrayó que, lo planteado en este punto es que, para poner fin a la pandemia del sida se requieren recursos adecuados y sostenibles, así como un entorno legal que facilite el acceso a servicios de VIH efectivos, equitativos y centrados en las personas, ya que la creciente brecha de financiación está frenando la respuesta al VIH en países de ingresos bajos y medianos.