San Antonio (EE.UU.), 29 may (EFE).- Más de 400.000 personas siguen sin tener electricidad en Texas (EE.UU.) tras el paso de fuertes tormentas que comenzaron el fin de semana y continuaron el martes por la noche.
El área de Dallas, en el norte del estado, es una de las más afectadas, donde casi 200.000 personas continúan sin servicio eléctrico, según datos de la página web especializada Poweroutage.us.
El juez del condado de Dallas, Clay Jenkins, declaró el martes estado de emergencia para lidiar con las tormentas y las autoridades informaron que las labores de reparación están en curso pero tomarán “varios días”.
“Tenemos personas trabajando para recuperar la electricidad lo más rápido posible, pero podrían pasar varios días hasta que se completen las reparaciones”, señaló en un comunicado la Alcaldía de la ciudad, la tercera más poblada del estado.
El área de Houston, en el sureste, también se vio afectada por las lluvias y los fuertes vientos, que dejaron calles inundadas y árboles caídos el miércoles en la madrugada. Más de 30.000 personas en la zona aún siguen sin electricidad, según informaron medios locales.
Las tormentas del martes dejaron un muerto en la localidad de Magnolia, a las afueras de Houston, cuando un joven de 16 años quedó atrapado en los escombros de un edificio que colapsó.
El menor de edad, identificado como John Aaron García, estaba trabajando en unas obras en la zona cuando la estructura comenzó a tambalearse por los fuertes vientos y acabó cayéndose, según relataron testigos a la cadena ABC 13.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS, en inglés) informó en la madrugada que es posible que las lluvias continúen afectado el área del norte y el centro de Texas este miércoles, a medida que las condiciones climáticas adversas se desplazan hacia el este.
“Se pronostica que el promedio de precipitaciones hacia el final de la semana aumente, llegando hasta más de dos pulgadas (5,08 centímetros) en gran parte de Kansas, Oklahoma, el norte de Texas, el sur de Arkansas y el norte de Luisiana”, señaló el NWS en un comunicado.