Transcurrieron más de 30 años desde la última vez que la República Dominicana fuera sede de las Reuniones Anuales de las Asambleas de Gobernadores del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y del BID Invest, pero la espera terminó y, desde mañana, la ciudad de Punta Cana será el escenario donde junto a otros 47 gobernadores de países miembros vamos a debatir y plantear soluciones a problemáticas económicas y sociales de la región y abordaremos aspectos institucionales del Banco.
Como bien ustedes saben, nuestro país se encuentra en camino a ser una economía desarrollada; es un trayecto largo, pero posible, que conlleva la canalización de cuantiosos recursos públicos hacia áreas fundamentales para que la población alcance un bienestar económico y social semejante al de los ciudadanos de naciones desarrolladas; un esfuerzo para el cual siempre hemos contado con el apoyo financiero y técnico del Grupo BID, así como también su valioso acompañamiento, que agradecemos en nombre del Estado.
Desde el inicio oficial de la relación entre el país y el BID, surgida en la década de 1960 cuando la República Dominicana se convirtió en miembro del Banco, tras su fundación en 1959, hemos obtenido del organismo recursos para avanzar en áreas tan vitales para el desarrollo social como infraestructura, educación, salud, transporte, desarrollo rural, energía y fortalecimiento institucional, entre otras.
Sin lugar a duda, el BID es un gran aliado de nuestro país en acciones que procuran el bienestar de nuestros ciudadanos, apoyo del cual estamos más que complacidos. Hoy en día, se encuentran vigentes 24 programas con el sector público, tanto de apoyo presupuestario, como de inversión pública, 9 con el sector privado y cerca de 52 cooperaciones técnicas en donaciones, lo que se traduce en que los dominicanos tenemos financiamientos activos con el Banco por alrededor de 2,500 millones de dólares, recursos distribuidos en los sectores claves, muchos de ellos con impacto a nivel nacional.
Entre estas obras y programas podemos mencionar la primera fase de ampliación y rehabilitación del Puerto de Manzanillo, por un monto de cien millones de dólares, que nos permitirá mejorar los niveles de competitividad, impulsar el crecimiento socioeconómico de la zona noroeste y continuar avanzando en la meta de convertir al país en un “hub” logístico regional, resultando en más y mejores oportunidades de empleos para la población.
Citamos también la segunda fase del proyecto de Desarrollo Turístico Integral de la Ciudad Colonial, por 90 millones de dólares y el cofinanciamiento del programa de Gestión Integral de Residuos Sólidos en el Gran Santo Domingo, con una inversión total 110 millones de dólares liderado por el BID en conjunto con otros co-financiadores.
Es importante resaltar, que el BID es nuestra mayor fuente de recursos dentro de los acreedores oficiales internacionales, representando el 44% de financiamiento multilateral, al cierre del 2023, lo que también evidencia su confianza en el país.
Ha sido también un socio importante en términos de asistencia técnica y experticia en diversas áreas. Esto ha ayudado al Estado a mejorar la eficiencia de sus políticas públicas y programas de desarrollo.
En el acompañamiento técnico podemos citar dos casos actuales: el apoyo a la implementación y elaboración de programas de saneamiento para ciudades costeras y el apoyo a la implementación del Programa de Eficiencia Energética.
El Grupo BID no solo es un aliado del sector público, nuestro sector privado también recibe un apoyo significativo del BID Invest y del BID Lab a iniciativas en áreas como energía renovable, mipymes lideradas por mujeres y otras.
Y no podemos dejar de mencionar el rol eficiente del organismo como ente promotor de sinergias en los sectores público y privado, esencial para lograr un avance colectivo y sostenible.
Son más de 60 años de una relación que se ha fortalecido con el paso del tiempo. Precisamente, estos encuentros que realizaremos desde este miércoles nos permitirán estrechar aún más los lazos de cooperación, tanto con el Grupo BID como con naciones hermanas, para avanzar en las mejoras que requiere el país de cara al desarrollo.
Abordaremos temas que el Gobierno ha puesto como prioridad en su agenda, entre ellos la transición energética y uno de los principales retos que enfrenta el país: el cambio climático, que como sabemos, impacta cada año en las finanzas públicas.
Nuestro objetivo está claramente definido: cada centavo que el Gobierno gaste tiene que impactar positivamente en la calidad de vida de la gente.
Para esto, una de las estrategias de la actual administración es acudir a organismos como el BID para el apoyo financiero y técnico en el diseño y ejecución de obras y programas que nos permitan alcanzar este objetivo en el menor tiempo posible y a mejores condiciones para la sostenibilidad de las finanzas públicas.
Podemos catalogar el alcance de la intervención del Grupo BID en el país, a través de sus tres ventanillas: BID, BID Invest y BID Lab, como amplia y diversa, y su permanencia como crucial y altamente positiva.
Bienvenidos a República Dominicana, presidente Ilan y delegación presente; esta es su casa. Nos enorgullece la celebración de las Asambleas en nuestro país, y más aún, conociendo la trascendencia de las decisiones que este año se tomarán en este extraordinario evento.
¡Muchas gracias!