El presidente ruso, Vladimir Putin, aseguró este lunes que está dispuesto a reactivar el acuerdo sobre los cereales con Ucrania, pocas horas después de que el ejército ruso bombardeara infraestructuras agrícolas ucranianas en un puerto fluvial en el Danubio.
“Lo haremos cuando se apliquen los acuerdos sobre las restricciones en las exportaciones de productos agrícolas rusos”, declaró Putin durante una rueda de prensa con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, en Sochi, en el litoral ruso en el mar Negro.
Durante esa misma comparecencia, Erdogan afirmó que su país ha hecho “nuevas propuestas” para reactivar el acuerdo sobre la exportación de cereales ucranianos a través del mar Negro, alcanzado en el verano de 2022 a través de la mediación de Turquía y la ONU y que Fue suspendido en julio por Rusia.
En tanto, Estados Unidos advirtió el lunes que el líder norcoreano, Kim Jong Un, espera viajar a Rusia para discutir con Putin la venta de armas a Moscú para su guerra en Ucrania.
“Como hemos advertido públicamente, las negociaciones sobre armas entre Rusia y la RPDC (Corea del Norte) están avanzando activamente”, dijo la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Adrienne Watson, utilizando un acrónimo para Corea del Norte.
“Tenemos información de que Kim Jong Un espera que estas discusiones continúen hasta incluir un compromiso diplomático a nivel de líderes en Rusia”.
El acuerdo sobre la exportación de granos contaba con un convenio paralelo para que Rusia pudiera vender sus productos, cuyos envíos se ven perjudicados por las sanciones occidentales contra Moscú, y el Kremlin espera propuestas concretas para volver a ceñirse al pacto.
Sin embargo, Putin y Erdogan no hicieron anuncios más concretos sobre una reactivación del pacto cerealero en las próximas semanas, lo que permitiría la exportación de las cosechas de otoño de Ucrania, uno de los mayores exportadores de granos y aceite del mundo y del que depende el mercado alimentario mundial.
“Hoy hemos sido testigos de una nueva confirmación de que cualquier ‘negociación’ con #Putin es engañosa e inútil… Vive claramente en su propia realidad, en que ‘todo el mundo es responsable excepto él'”, aseguró Mijailo Podoliak, uno de los principales asesores del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.
Tensiones en el mar Negro
En el frente, las autoridades ucranianas informaron de nuevos bombardeos rusos contra infraestructura agrícola e industrial en Izmail, en el suroeste, donde está un puerto fluvial del Danubio que es clave para las exportaciones ucranianas.
Kiev afirmó que derribó 23 drones lanzados por Rusia en el sur y en el sudeste.
Oleg Kiper, el gobernador de la región de Odesa, en el sur, informó que “en varias localidades del distrito de Izmail hubo daños en bodegas y edificios de fábricas, maquinaria agrícola y empresas industriales”, sin víctimas.
El puerto fluvial de Izmail se ha convertido en la principal ruta de las exportaciones ucranianas después de que Rusia se retirara del acuerdo del mar Negro.
Los militares ucranianos informaron de que Rusia utilizó drones Shahed, de fabricación iraní, en el ataque nocturno que calificaron como “masivo” y dijeron que “fue dirigido contra la infraestructura civil de la zona del Danubio”.
Rusia afirmó este lunes que destruyó cuatro lanchas rápidas ucranianas que transportaban soldados en el mar Negro, después de que el 30 de agosto las fuerzas rusas reivindicaron que destrozaron embarcaciones de las fuerzas especiales de Kiev.
Las autoridades rusas afirmaron que las embarcaciones viajaban en dirección a cabo Tarjankut, al oeste de la península de Crimea, anexada por Moscú en 2014.
Moscú también denunció este lunes que repelió bombardeos ucranianos con drones, uno cerca de la península de Crimea, y otro en Kursk, una región rusa del sur cercana a la frontera con Ucrania.
En el avance de la contraofensiva ucraniana, Kiev reivindicó este lunes que sus tropas lograron progresos reducidos en el frente sur, donde concentra su operación para repeler a las fuerzas rusas, y que también recuperó territorio cerca de Bajmut, una localidad del este, arrasada por los combates y que Rusia logró tomar en mayo tras una lucha feroz.
En la capital ucraniana, las autoridades anunciaron que recibieron una nueva alerta de bomba contra todas las escuelas de Kiev, tres días después de una primera amenaza, que resultó falsa, el 1 de septiembre, la fecha del inicio del curso escolar.
La policía local de Kiev indicó por la tarde que “había recibido informaciones” sobre la posible presencia de explosivos “en todos los centros comerciales y de ocio” de la capital.