La inculpación de Trump sume a EEUU en incertidumbre judicial y política

La inculpación de Trump sume a EEUU en incertidumbre judicial y política

La inculpación oficial de Donald Trump hace que todo Estados Unidos se pregunte ¿y ahora qué? La carrera por la Casa Blanca en 2024 es más incierta que nunca y el calendario judicial del expresidente republicano también.

Esto mientras el otro gran contendiente, el presidente demócrata Joe Biden, se toma su tiempo para anunciar una candidatura que se da por hecha.

Ante un juez de Nueva York, Donald Trump, el primer expresidente estadounidense inculpado, se declaró no culpable de haber orquestado pagos para silenciar asuntos perjudiciales para él antes de las presidenciales de 2016.

Queda por ver si este caso, uno de los muchos que preocupan al multimillonario, irá a juicio.

El calendario es fundamental para él, dado que espera ganar la nominación republicana para las presidenciales de noviembre de 2024.

La justicia apuesta por una próxima comparecencia a finales de año y un juicio en enero de 2024, justo antes de las primarias, pero los abogados del expresidente no están de acuerdo.

“No iremos ante un jurado”, afirmó a NBC el miércoles uno de ellos, Joe Tacopina, convencido de que el caso caerá por su propio peso debido a dificultades legales. Lo tachó de caso “zombi”.

Entre tanto Trump, que quedó en libertad, puede hacer campaña a su antojo con la condición de “abstenerse de comentarios que puedan incitar a la violencia” sobre su caso, le advirtió el martes el juez Juan Merchán, quien no le impuso la “ley mordaza”, una prohibición absoluta de mencionar el procedimiento en público.

Pero la moderación no es el punto fuerte del magnate, quien el martes por la noche trató de aprovechar la atención mediática que conllevó su inculpación.

El expresidente, que estuvo tenso durante todo el día, calificó la imputación, detallada en 34 cargos, de “insulto a la nación”, desde Mar-a-Lago, su lujosa residencia en Florida. Estimó que el propio fiscal debería ser “procesado” y dijo que el juez y su familia lo “odian”.

Su discurso, provocador y monótono por momentos, fue ante simpatizantes que acudieron a escucharlo ataviados con las gorras rojas típicas de sus mítines.

– Justiciable –

Después de un viaje que intentó que pareciera lo más presidenciable posible, con avión privado y caravana de seguridad por las calles de Nueva York, Trump tuvo que enfrentarse a dos horas en una sala judicial de Manhattan.

El expresidente dio su nombre, edad y profesión, y se sometió a la toma de huellas dactilares, pero evitó la humillante foto policial.

El multimillonario asegura ser víctima de una “caza de brujas” promovida por los demócratas del presidente Biden, quien según él le “robó” su victoria presidencial en 2020.

Por su parte el demócrata consideró que esta comparecencia “no era una prioridad” para él, según la portavoz de la Casa Blanca Karine Jean-Pierre.

Trump está acusado de “orquestar” una serie de pagos para encubrir tres casos antes de las elecciones de noviembre de 2016. En particular el pago de 130.000 dólares a la actriz porno Stormy Daniels, con quien habría mantenido una relación extramatrimonial en 2006 que él niega rotundamente.

Donald Trump “no ha parado de mentir”, afirmó el fiscal de Manhattan Alvin Bragg, del Partido Demócrata, que denuncia una “conducta delictiva grave”.

Biden ha optado por mantenerse al margen, negándose a comentar los problemas legales de su posible rival en 2024. Y siguió con su agenda con una indiferencia casi total.

Pero espera que a largo plazo le beneficie, sobre todo porque Donald Trump no ha hecho más que empezar una serie de comparecencias y procesos judiciales.

Y es que el expresidente es objeto de varias investigaciones: por haber intentado presuntamente influir en los resultados de las presidenciales en Georgia, por su supuesto papel en el asalto de sus simpatizantes al Capitolio el 6 de enero de 2021 y por la gestión de documentos confidenciales.

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© Agence France-Presse