Rangún, Birmania. El gigante suizo de la agroalimentación Nestlé abandonará su producción en Birmania, afirmó este lunes un portavoz del grupo, como hicieron otras empresas extranjeras desde el golpe de Estado de febrero de 2021.
A causa de la “situación económica actual”, la fábrica que tiene Nestlé en Rangún y la sede social del grupo “cesarán su actividad”, declaró un portavoz a AFP, sin precisar ninguna fecha.
Varias multinacionales abandonaron Birmania desde 2021, en parte por la presión de las organizaciones de defensa de derechos humanos, incluyendo a la francesa TotalEnergies, la estadounidense Chevron, la australiana Woodside, el fabricante de cerveza japonés Kirin, la cigarrera británica BAT y el operador de telecomunicaciones noruego Telenor.
Nestlé comercializa en Birmania el café instantáneo Nescafé, pastas de la marca Maggi y la bebida achocolatada Milo.
“Haremos cuanto esté en nuestra mano para apoyar a las personas afectadas por esta decisión”, afirmó el portavoz, que explicó que el grupo emplea a 138 personas en la fábrica y en la sede social de Birmania.
Según la fuente, una empresa birmana comercializaría y distribuiría en su lugar los productos de Nestlé en Tailandia, Malasia y Filipinas.
Birmania quedó sumido en el caos desde el golpe de Estado de 2021 en el que el gobierno civil de Aung San Suu Kyi fue derrocado. La represión de la disidencia por parte del ejército dio lugar a combates en varias regiones del país.
Más de 3.000 personas han muerto en el marco de la represión desde que el ejército se hizo con el poder del país, y más de 19.000 fueron detenidas, según un grupo local de monitoreo.
El grupo suizo tuvo una facturación de unos 95.600 millones de euros (101.200 millones de dólares) en todo el mundo en 2022.
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