Cuando la guerra en Ucrania entra en su segundo año, el apoyo local para la invasión de Vladimir Putin sigue siendo alto, gracias a una ola de propaganda y represión que silencia a los críticos.
La invasión de Rusia a Ucrania está entrando en un segundo año, ya que el presidente Vladimir Putin mantiene un estrangulamiento en el público ruso, ahogando rápidamente cualquier voz disidente.
Para apuntalar el apoyo, el Kremlin está utilizando un enfoque de zanahoria y palo: resumiendo dinero en efectivo a personas en regiones empobrecidas y cerrando los medios de comunicación que expresan cualquier cosa menos la versión estatal de los eventos.
Al hacerlo, Putin mantiene la opinión de que la guerra está lejos, y la culpa de los Estados Unidos y sus aliados, mientras está alcista sobre la economía rusa y cómo las sanciones occidentales no han logrado aplastarla.
Según encuestas independientes, el mensaje de Putin está funcionando, a pesar de que la invasión se prolonga mucho más de lo que el Kremlin esperaba, la mayoría de los rusos dicen que están preparados para seguir luchando.
BY NINIAN CARTER
