El rapero estadounidense Jay-Z se ha convertido en el primer artista del rap del mundo en alcanzar una fortuna que supera los 1.000 millones de dólares, lo que además lo convierte en uno de los pocos artistas que han logrado convertirse en multimillonarios, según publica este lunes la revista Forbes.
Su emporio empresarial se encuentra en constante crecimiento y se diversifica con inversiones que van desde su sello discográfico Roc-A-Fella Records hasta inmuebles y marcas de licores. El artículo señala que a lo largo de su trayectoria, el cantante tuvo que escalar peldaños desde abajo, recordando que antes de dedicarse a la música vendió droga para poder pagar las cuentas.
Inversiones diversificadas
Entre las de empresas, bienes y marcas del rapero destacan las siguientes:
- Participaciones en la compañía de champán Armand de Brignac por valor de 310 millones de dólares.
- Cartera de inversiones en diversas compañías (entre ellas, Uber) por valor de 220 millones de dólares.
- Su propia marca de coñac, D’Ussé, creada en asociación con Bacardi, valorada en 100 millones de dólares.
- La empresa escandinava de música en ‘streaming’ Tidal, adquirida en 2015, valorada en 100 millones de dólares.
- La empresa de entretenimiento Roc Nation, que presta servicios a estrellas del deporte, música y cine, valorada en 75 millones.
- Una colección de obras de arte valuada en 70 millones de dólares.
- Inversiones en bienes raíces por 50 millones de dólares.
Jay-Z, quien está casado con la también cantante Beyoncé, ya fue mencionado el año pasado en otra publicación de Forbes que lo colocó entre los 10 artistas mejores pagados del mundo, con unos ingresos anuales de 76,5 millones de dólares.
Fuente: RT Actualidad