El ministro de Defensa, René Francis Merino Monroy, adelantó que se estudian incursiones como las de Soyapango y Comasagua
El Gobierno de El Salvador estima realizar nuevas incursiones en distintos territorios del país para perseguir a pandilleros, similares al reciente cerco militar desplegado en el municipio de Soyapango, que ha permitido la captura de más de 185 personas.
“Ayer por la noche ya llevábamos 185 pandilleros capturados, ahora van más a este momento“, dijo el ministro de Defensa, René Francis Merino Monroy, entrevistado por un medio local para hacer un balance de la inédita operación.
El titular de Defensa detalló que el cerco militar en Soyapango –que contó con más de 10.000 uniformados– tiene unos 40 puntos de “extracción”, identificados por agentes de Inteligencia, para sacar a los presuntos delincuentes que se esconden en ese municipio, el más poblado de El Salvador.
Ya desde el lunes, Merino Monroy había adelantado que el plan del Ejecutivo era replicar la toma militar de Soyapango en otras localidades, donde la población denuncie la presencia de pandilleros pertenecientes a bandas como la Mara Salvatrucha y Barrio 18.
Hoy, el ministro ratificó esa política y aseguró que mientras la población denuncie, los resultados del Plan de Control Territorial “serán más rápidos”. En paralelo, continúan las críticas por parte de la oposición, debido al alcance de una operación ejecutada bajo el estado de excepción.
“Si de verdad en algún momento cercan e impiden el libre tránsito, estarían violando otro derecho que, al menos con el régimen de excepción que ellos han aprobado, no está suspendido”, denunció la diputada de San Salvador por el opositor FMLN, Andrea Belloso.
Desde finales de marzo de este año, el Gobierno de Bukele declaró un estado de excepción que restringe varias libertades a la población y permite intervenciones de la fuerza pública, sin que estas tengan la obligación de presentar una autorización por parte de la justicia.
“Con el objetivo de extraer hasta el último terrorista, seguimos ejecutando la Fase 5 en puntos estratégicos de Soyapango. Los delincuentes no podrán escapar del Cerco Soyapango”, informó este martes la Policía Nacional Civil de El Salvador, tras detallar que continuarán los registros vehiculares en la zona, para garantizar “que no se transporten terroristas, ni sus ilícitos”.
Entretanto, durante esta misma jornada, el Ministerio de Seguridad actualizó a 59.307 el número de presuntos pandilleros detenidos desde que se puso en marcha el estado de excepción, mientras el Ejecutivo presume el reporte de cero homicidios en los primeros cinco días del mes diciembre.
Persecución a pandillas
El plan de control territorial, implementado por la administración de Nayib Bukele desde 2019, cuenta con cinco fases que contemplan: la capacitación del personal de seguridad, la inversión social, el equipamiento de las fuerzas del orden, el aumento de los uniformados y la “extracción” de pandilleros en varios municipios. El mandatario aseguró a finales de noviembre que ya el programa estaba en la quinta etapa.
El objetivo de Bukele es que el Estado retome el control territorial de las zonas históricamente bajo la ley de las pandillas. Antes de este cerco a Soyapango –donde viven unas 300.000 personas–, las autoridades hicieron un despliegue similar en la población de Camasagua, habitado por unos 12.000 ciudadanos. En esa oportunidad participaron unos 2.000 soldados y equipos tácticos de la Policía Nacional Civil (PNC).
“Tenemos la capacidad, como gabinete de seguridad, de llegar a esos lugares donde la población nos está diciendo que hay delincuentes. En el municipio donde se vayan a esconder, ahí vamos a llegar en determinado momento“, aseguró Merino Monroy el pasado lunes.