Un conocido parque situado en el corazón de Berlín podría convertirse en una suerte de paraíso para los traficantes de droga de la capital alemana. Tras años sin conseguir que la compraventa incontrolada de estupefacientes en el recinto fuera atajada, su responsable decidió esta semana claudicar y dar vía libre a los vendedores. Por esta razón, el asfalto del parque Görlitzer, en el céntrico distrito de Friedrichshain-Kreuzberg, ha amanecido estos días con una serie de marcas de espray en el suelo, en un intento de habilitar un espacio para que los vendedores puedan operar con total libertad.
«Es un método absolutamente racional, no es que estemos legalizando la venta de drogas», declaró el responsable del parque, Cengiz Demirci, a una emisora local, a lo que añadió que la adecuación de una zona para que los traficantes pudieran trabajar «supondría que los visitantes dejasen de sentirse intimidados para pasear tranquilamente». En los últimos tiempos, los vecinos del distrito se habían resignado a adentrarse en el Görlitzer, donde, según información de medios locales, pululan a sus anchas hasta más de 200 vendedores debido a la incapacidad de la policía para mantenerlo despejado.
Demirci comentó que, en su opinión, el problema se atajaría de golpe si las autoridades concedieran a los traficantes –en su mayoría solicitantes de asilo– permisos legales de trabajo, ya que, en su situación, no tienen la posibilidad de ser contratados en empleos regulares.
Por su parte, la Policía de la capital no dudó en criticar la decisión y apostar por una mayor presencia de efectivos en el parque. En abril, el ministro de Interior, Frank Henkel, se comprometió a adoptar una postura de «tolerancia cero» hacia los traficantes en el parque. No obstante, los residentes de los aledaños aseguran que nada ha cambiado desde entonces.
Las críticas más contundentes llegaron de la mano de la Comisionada estatal de Estupefacientes, la democristiana Marlene Mortler, que declaró que «de confirmarse, esto supondría nada menos que la resignación del Estado de derecho. No deberíamos conceder a los traficantes un permiso para delinquir». El alcalde del distrito comentó ayer (miércoles) que la medida no es aún definitiva.
Fuente: ABC