El gobierno de Colombia suspendió las órdenes de captura y de extradición de los negociadores del ELN en Cuba para avanzar en un proceso de paz con esa guerrilla, anunció este sábado el presidente Gustavo Petro.
El mandatario levantó por decreto las medidas contra el equipo del Ejército de Liberación Nacional (ELN) previo a la reanudación de los diálogos, probablemente en La Habana.
“He autorizado (…) suspender órdenes de captura a esos negociadores; suspender órdenes de extradición (…) para que comience un diálogo con el Ejército de Liberación Nacional”, señaló Petro al término de un consejo de seguridad en el municipio de San Pablo (norte).
El presidente confió en que el futuro proceso de paz con la última organización rebelde reconocida en Colombia sea “rápido y expedito”, y ponga fin a seis décadas de levantamiento armado.
La delegación de paz en Cuba está conformada por diez integrantes a la cabeza de Pablo Beltrán. Estados Unidos ha pedido en extradición a 11 rebeldes, bajo cargos de narcotráfico, pero hasta el momento ninguno de los delegados en Cuba aparece en la lista.
El gobierno antecesor de Iván Duque rompió en 2019 las negociaciones que había iniciado el exmandatario y nobel de paz Juan Manuel Santos, a raíz de un ataque con coche bomba contra una escuela de policía que dejó 22 muertos, además del agresor.
Duque ordenó nuevamente la captura de los delegados del ELN y exigió sin éxito a Cuba su entrega, desconociendo los protocolos que habían acordado las partes, con la mediación de garantes internacionales, al inicio del fallido proceso de paz.
Dichas normas establecían el retorno seguro al territorio colombiano del equipo negociador del ELN en caso de que no prosperaran las conversaciones, pero Duque insistió en presionar al gobierno cubano para que hiciera efectiva la captura de los guerrilleros, lo que deterioró las relaciones entre ambos países.
Sin embargo, con la llegada del primer gobierno de izquierda en Colombia se abrieron las puertas a un nuevo proceso de paz.
Este sábado Petro anunció que restituyó los “protocolos” que desconoció su antecesor y amplió su oferta de diálogo al Clan del Golfo, la mayor organización armada del narcotráfico que también se hace llamar Autodefensas Gaitanistas de Colombia.
“Invito a quienes integran las llamadas autodefensas para iniciar un camino similar”, enfatizó.
El gobierno de Petro y el ELN ya tuvieron un primer acercamiento en La Habana la semana pasada, al cabo del cual manifestaron su intención de instalar una mesa de negociación.
Después de la ruptura de las conversaciones en 2019, el ELN aumentó su pie de fuerza, pasando de 1.800 a 2.500 combatientes y colaboradores, según estimaciones oficiales.