Santo Domingo. El arzobispo metropolitano de la Arquidiócesis de Santo Domingo S.E.R. Monseñor Francisco Ozoria Acosta, celebró junto a los Obispos Auxiliares, Sacerdotes, Diáconos y toda la feligresía la Gran Fiesta de Corpus Christi, donde se exaltó y adoró la presencia viva de Jesús Eucaristía; en el marco Jubilar Altagraciano con el lema: “Con María de la Altagracia, Adoremos a Jesús Eucaristía”. Este jueves 16 de junio 2022, en el Faro a Colón.
Después de dos años sin la posibilidad de reunirse a causa de la pandemia, miles de fieles entre niños, jóvenes y adultos unidos como Iglesia sinodal, marcharon llenos de alegría en procesiones organizadas por Vicarías Territoriales y el Distrito Nacional, identificados por colores, culminando en el Faro a Colón con una adoración y celebración Eucarística. Un auténtico, sentido y multitudinario acontecimiento de Iglesia para vivir y testimoniar la fe, de manera especial para el actual contexto que se vive como sociedad en nuestro país.
El Corpus Christi o Solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo es una celebración que honra el santo sacrificio. Fue el Papa Urbano IV en el año 1264 quien ordenó que se celebrara cada año en el jueves siguiente a la Fiesta de la Santísima Trinidad, la cual se lleva a cabo el domingo sucesivo a Pentecostés (sesenta días después del Domingo de Resurrección).
La Eucaristía no es un memorial abstracto, sino un memorial vivo del amor de Dios, un sacramento inscrito en el ADN espiritual, recordó Papa Francisco hace algunos años atrás: “La Eucaristía es el sacramento de la unidad. Quien la recibe se convierte necesariamente en artífice de unidad, porque nace en él, Que el Pan de Vivo ( Jesús Eucaristía) nos sane de la ambición de estar por encima de los demás, de la voracidad de acaparar para sí mismo, de fomentar discordias y diseminar críticas; que suscite la alegría de amarnos sin rivalidad, envidias y chismorreo calumniadores”.