El secretario nacional de Comunicaciones y de la Presidencia de la Juventud del Partido Revolucionario Moderno (PRM). Ricardo Gil, afirmó este miércoles que sigue en su partido y que sigue luchando junto a la juventud, para impulsar los espacios y los cambios que todos anhelamos.
Luego de que en el día de ayer los medios de comunicación se hicieran eco de su renuncia a la militancia del partido oficialista, Gil utilizó su cuenta de Twitter para aclarar que esta noticia no corresponde con la realidad.
Dijo que después de conversar con la alta dirigencia y con varios compañeros del PRM, han llegado a grandes consensos, debe declarar que ha defendido y defiende el derecho al trabajo de todos los compañeros, especialmente de los jóvenes perremeistas, pero que como siempre, la lucha hay que darla adentro.
“La situación de la pandemia del Covid-19 y la gravedad del país nos afecta a todos, nos hace ser considerados con la situación que vivimos y conscientes de que pronto esto mejorará”, escribió el dirigente político en la secuencia de mensajes, en las que explicó que no ha renunciado al partido de gobierno.
Expresó que los jóvenes seguirían sumándose de manera militante a la defensa de este Gobierno, el cual calificó como histórico, liderado por el presidente Luis Abinader, que según el mismo, ha dado muchos resultados positivos para el país.
“Sigo en mi Partido, PRM, y sigo luchando junto a la juventud, para impulsar los espacios y los cambios que anhelamos todos”, dijo.
Gil pidió disculpas a todos, incluyendo a las autoridades PRM como su presidente, José Paliza y a Carolina Mejía, por la alegada malinterpretación que han producido sus comentarios, al tiempo que dijo que espera que juntos avancen en fortalecer al PRM y al Gobierno Dominicano.
Este martes se publicó la noticia de que Ricardo Gil había hecho su renuncia formal a su cargo de secretario nacional de Comunicaciones y al de la Presidencia de la Juventud del Partido Revolucionario Moderno (PRM).
Ricardo, dijo, en su cuenta de Twitter que tomó la decisión de renunciar a ambos cargos políticos por imposibilidad de conseguir empleos a los jóvenes del partido.