Santo Domingo.- La República Dominicana decidió no adoptar al Pacto Global sobre los Refugiados que será conocido este lunes 17 de diciembre, durante la Sesión Plenaria de la 73ª Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas en Nueva York, así lo manifestó el Ministerio de Relaciones Exteriores mediante un comunicado.
A pesar de reconocer el carácter humanitario del Pacto de Refugiados que tiene el interés de buscar una cooperación internacional para enfrentar los problemas y desafíos que generan los grandes desplazamientos humanos en diferentes partes del mundo, el Ministerio De Relaciones Exteriores explicó que algunos principios de este acuerdo están sustentados en dos instrumentos internacionales que República Dominicana no forma parte.
Estos son: la Convención sobre el Estatuto de los Apátridas de 1954 y la Convención para Reducir los Casos de Apatridia de 1961, que a pesar de estar firmada por nuestro país, aun no está ratificada. Explica que esta situación obliga a estudiar a fondo los compromisos que se derivan de dichas convenciones y si éstos se ajustan a la Constitución y al resto del ordenamiento jurídico dominicano.
Según las leyes dominicanas, solo el Estado dominicano puede conceder la condición de refugiado. Sin embargo, “el Pacto pretende suministrar las bases para una distribución de la carga y la responsabilidad entre los Estados miembros de las Naciones Unidas, lo que podría ser contrario al interés nacional y al ordenamiento, jurídico dominicano”, reza el documento.
“La distribución de cargas y responsabilidades podría afectar la capacidad de República Dominicana para acoger cantidades considerables de personas susceptibles de ser declaradas como refugiados conforme al nuevo estatuto internacional”, reza el comunicado.
Entre tanto, el documento sostiene que la República Dominicana es un país solidario y reitera su compromiso ante de las Naciones Unidas de contribuir con la paz, la seguridad, la resolución pacífica de los conflictos y la protección de los derechos humanos pero que se abstendrá de adoptar el Pacto Global sobre Refugiados por las razones antes expuestas.